Este miércoles, el Boletín Oficial del Estado (BOE) ha publicado las medidas aprobadas por el Consejo de Ministros, ayer martes, con las que el Gobierno pretender paliar las consecuencias de las de la guerra en Ucrania. Este documento incluye el acuerdo entre la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, y la vicepresidenta segunda y titular de Trabajo, Yolanda Díaz, para prohibir el despedido para las empresas que reciban ayudas públicas durante esta crisis. De esta forma, las compañías no podrán constituir como causa objetiva el aumento de los costes energéticos para destituir a sus empleados.
Según el Estatuto de los Trabajadores, los empresarios tienen la posibilidad de extinguir la relación laboral cuando concurran ciertas causas motivadas. Estas son por la ineptitud del trabajador, por su falta de adaptación, por causas económicas, organizativas o de producción y por falta de dotación económica.
Ineptitud del trabajador
Una empresa podrá terminar su relación laboral con un trabajador cuando este muestre una ineptitud para realizar las actividades por las que se le contrató. Esta puede ser conocida o sobrevenida. Sin embargo, si el responsable era conocedor de esta carencia antes de los procesos de selección, el empresario no podrá alegar esta causa para despedirlo. Este límite se marcó para garantizar los derechos de los trabajadores y evitar el abuso de los empleadores.
Falta de adaptación
En el caso de que la persona contratada no se adecue a las modificaciones técnicas operadas en su puesto de trabajo, "cuando dichos cambios sean razonables", el empresario podrá despedir al empleado. Eso sí, previamente el responsable debe haber ofrecido al sujeto un curso dirigido a facilitar la adaptación a las modificaciones. Durante el tiempo de formación, la compañía tendrá que abonarle el sueldo correspondiente. De igual modo, el despido no puede ser al instante, como mínimo deben haber pasado dos meses desde que se introdujo el cambio o desde que finalizó la formación.
Causas económicas, organizativas y de produción
Respecto a los motivos económicos, se detalla que para que la situación de una empresa sea considerada como negativa se tiene que mantener durante tres trimestres consecutivos y se requiere que el nivel de ingresos o ventas de cada uno de ellos haya sido inferior al del mismo trimestre del ejercicio anterior.
En cuanto a las causas técnicas, esta justificación está relacionada con la organización de la empresa. Tiene lugar en el momento en el que se introduce un nuevo método de trabajo. El empresario puede despedir a sus empleados si ya no son necesarios después de haber mejorada la estructura de la compañía.
Por último, en lo que se refiere a los motivos productivos, este ejemplo de despido objetivo hace referencia al cambio en la demanda de productos o servicios de la empresa. A diferencia del resto, esta causa es ajena a la acción de la compañía y depende del comportamiento de la sociedad.
Falta de dotación económica
Esta causa solo es aplicable para los trabajadores directamente contratados por entidades sin ánimo de lucro para la ejecución de planes y programas públicos determinados, sin dotación económica estable y financiados por las Administraciones Públicas.
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