Los triángulos

Son indispensables para señalizar el vehículo en caso de accidente o avería. Además, llevarlos en el maletero te ahorrará una multa de 200 euros, porque son obligatorios. 

Un pequeño botiquín

Es recomendable sobre todo en viajes largos, pero ¿para qué andar cogiéndolo y dejándolo si se puede llevar siempre en el maletero? Un pequeño botiquín será útil en caso de sufrir pequeñas heridas, cortes... durante el trayecto.

El chaleco reflectante

Otro objeto indispensable a la par que obligatorio. Aunque, atendiendo a razones, será mejor llevarlo en el habitáculo antes que en el maletero, ya que hay que salir del coche con el puesto en caso de avería. 

Un extintor para coche

Nunca se sabe cuándo se puede necesitar uno, ya que aunque parezca una escena de ficción es cierto que en el vehículo se puede producir un incendio. Los aptos para vehículo son pequeños y no suelen costar más de 20 euros.

Un kit de herramientas

Un pequeño juego de herramientas puede ayudar a salir del paso a cualquier conductor en apuros. No te olvides tampoco de un par de trapos limpios y unas bayetas suaves, por si hiciera falta limpiar algún elemento del coche.

Las cadenas para la nieva

En invierno es recomendable llevar un juego de cadenas para nieve en el coche, sobre todo dependiendo de la zona por la que se circule habitualmente. De todas formas, no son obligatorias.

Una linterna

Nunca se sabe cuándo puede hacer falta, pero es aconsejable llevar una linterna potente con pilas o batería suficiente en el maletero. Será útil en caso de avería en carretera por la noche. 

Un kit antipinchazos

Si bien no es obligatorio llevar una rueda de repuesto ni un kit antipinchazos, este último es más cómodo de llevar en el maletero y más fácil de usar. 

Agua embotellada

Puede servir tanto para limpiar de manera urgente el parabrisas del coche, por ejemplo, en caso de necesidad o para beber en caso de avería en la carretera. 

Una manta térmica

Jamás se sabe cuándo se va a sufrir una avería con el coche durante un viaje largo ni en qué condiciones. Todos los 'por si acasos' son necesarios cuando se prevé un trayecto largo.