La cocina de verano de Andalucía… es una fresca!

  • El gazpacho no siempre fue una sopa triturada y no siempre llevó tomate, un ingrediente que no llegó hasta el siglo XIX.
  • Más sopas frías: poleá, zoque, alboronía, sopa de gato y caldillo de perro.
  • Andalucía domina la fritura: pescaítos fritos, pavías, parpandúas, chanquetes, etc.
Ajoblanco: pan, almendras, ajo, agua, aceite de oliva, sal y vinagre.
Ajoblanco: pan, almendras, ajo, agua, aceite de oliva, sal y vinagre.
FLICKR/cyclonebill
Ajoblanco: pan, almendras, ajo, agua, aceite de oliva, sal y vinagre.

Donde hay calor la cocina se adapta y acompaña. Para fresca y de verano la cocina del Sur, que comienza por las sopas frías. La primera que nos viene a la mente es el gazpacho. En un principio se elaboraba con pan, aceite, vinagre, sal y agua. A esa base, en Andalucía le añadieron otros ingredientes como el pepino, el ajo y el pimiento rojo y verde.

Pero el gazpacho no siempre fue como hoy lo tomamos. Inicialmente no era una sopa triturada; eso llegó cuando las clases más acomodadas comenzaron a tomarlo. Del mismo modo, el tomate –que hoy nos parece el ingrediente básico del gazpacho– no llegó hasta el siglo XIX.

El gazpacho no es la única sopa fría, aunque sí la más famosa, de Andalucía. Un primo hermano es el salmorejo cordobés, más denso, que se puede tomar en sopa o untado en una tostada de pan con jamón.

Delicioso también el ajoblanco, una sopa fría a base de almendras. El recetario lo completan: la poleá (una especie de gachas), el zoque (una variante del gazpacho), la alboronía (un guiso de berenjenas legado andalusí), la sopa de gato gaditana (sopa de pan y ajo) y el caldillo de perro (sopa de pescado con zumo de naranja).

¿Y si no trituramos los vegetales? Vamos con las ensaladas. Desde la clásica mixta hasta las más originales, como la pipirrana de Jaén, que lleva pimientos verde y rojo, cebolla, tomates, atún, aceite y vinagre.

Si pasamos a platos de más enjundia, los pescados son ideales para una comida de verano. En las mesas de Andalucía se domina el arte de la fritura como en ningún otro lado. Así se preparan los pescaítos fritos, las pavías de bacalao (bacalao rebozado), las parpandúas (tortitas de bacalao) o los chanquetes de Málaga.

Otros sabrosos productos del mar para el verano son el bienmesabe (cazón adobado), la ruta a la Roteña, los langostinos de Sanlúcar, la gamba blanca de Huelva o las almejas y mejillones.

Para nuestra mesa de verano, hemos dejado fuera las ollas, los guisos y las carnes. Pero si nos hemos quedado con hambre podemos echar mano de las chacinas como el lomo o el jamón ibérico de las Denominación de Origen Jamón de Huelva o Los Pedroches. Y los quesos: de la Alpujarra, de Sierra Nevada, de Antequera, Ronda, del Valle de los Pedroches y de la Sierra de Grazalema.

Para cierre un postre, que en Andalucía tienen una gran influencia árabe, como los pestiños y las rosquillas.

Fuente: Guía Repsol. Rutas, mapas, restaurantes … ¡Planifica con nosotros tu viaje!

Mostrar comentarios

Códigos Descuento