'La noche que Logan despertó': Xavier Dolan se despide a lo grande tras el anuncio de su retirada

A finales de 2022, el cineasta, guionista y actor canadiense Xavier Dolan sorprendía con el anuncio de su retirada como creador, que no como actor. Esta noticia inesperada surgía en mitad de la promoción de su primera serie, La noche que Logan despertó, uno de sus proyectos más personales tras la dirección de ocho películas y más de una veintena de participaciones como intérprete en títulos como It o Identidad borrada. 

Dolan sale por la puerta grande con este drama de cinco episodios, disponible en Filmin, que contienen los mejores ingredientes de todas sus películas anteriores, incluida la controvertida relación de una madre con sus hijos basada en las propias vivencias del autor, como este mismo confesara en varias ocasiones.

El cineasta canadiense ha explorado con un mayúsculo interés la complejidad de las relaciones maternofiliales, con un debut precisamente que lo reflejó en Yo maté a mi madre y alcanzando su punto más álgido en Mommy, ganadora del premio de jurado de Cannes 2014. Un leitmotiv que ahora es narrado en La noche que Logan despertó a través de la relación de Mado (Anne Dorval) con sus cuatro hijos, los díscolos Julien (Patrick Hivon), Mireille (Julie LeBreton), Denise (Éric Bruneau) y Elliot (el propio Dolan). 

Lo mejor del cine de Dolan y la BSO de Hans Zimmer

Basada en la obra teatral La nuit où Laurier Gaudreault se dévoile (La noche en que Laurier Gaudreault se revela), de Michel Marc Bouchard, Dolan demuestra su cercanía a los contenidos de este dramaturgo, del que ya adaptaba en el pasado Tom en la granja. Un artista con el que Dolan comparte muchas características de su obra y un tono similar, que se ha traducido en los guiños evidentes a la teatralidad del contenido original. 

Pero, Dolan va un paso más allá y centra la atención especialmente en la figura cuasi fantasmagórica de Logan, quien es acusado de la violación de Mireille por el propio Julien. Un triángulo de amigos roto por las rencillas y la verdad detrás de una tragedia, que ya viviéramos en el filme Los amores imaginarios, y que se suma a la desaparición y el posterior retorno de Mireille 20 años después, reconvertida en una reputada tanatóloga y dispuesta a poner patas arriba la vida de todos, como también ocurriera en Solo el filme del mundo. 

Aunque el propio Dolan rehúye de su papel como referente en la realización de cine LGTBI y denunciaba incluso recientemente (y acertadamente) la homofobia en la comparación de su cine con el de Almodóvar, que parte tan solo de que ambos son homosexuales, lo cierto es que su papel en la visibilidad del colectivo continúa muy presente. Así, La noche que Logan despertó indaga en los amores prohibidos, de los que también éramos partícipes en su última película, Matthias & Maxime.

Además, no podemos olvidar la oda a la libertad y la rebeldía que rezuma de cada plano mantenido y cada nota de la banda sonora, que en esta ocasión ha contado ni más ni menos que con el compositor Hans Zimmer. Algunas de las marcas de su filmografía de las que ya disfrutábamos en joyas de la cinefilia como Laurence Anyways y que nos regalan al mejor Dolan, quien, hastiado de su papel como creador ha decidido poner espacio entre sus creaciones y él. 

Pero como decía el cineasta Ettore Scola "el cine es un espejo pintado", una realidad que ha creado que el enfant terrible esté exhausto al plasmar demasiado de sí mismo, pero de la que una vez dentro es muy complicado escapar. Por lo pronto, La noche que Logan despertó ya ha sido catalogada por muchos como una de las mejores producciones creadas por el cineasta, ante el disgusto del propio Dolan y su odio hacia las listas de las mejores ficciones del año. 

Porque como ya dijera el personaje de Kit Harington en su filme Mi vida con John F. Donovan, cuyo diálogo resuena ahora como presagio de su la retirada del quebequés: "Cuidé mi trabajo, de mi carrera, de mi reputación. Cuidé de amigos y familiares. Y estaba tan ocupado, que me olvidé de trabajar en mí".

Ahora, La noche que despertó Logan se presenta como un ejercicio de honestidad al máximo exponente, que supone un compendio de toda la filmografía anterior de Dolan y nos regala los mejores ingredientes del cine del enfant terrible, indagando en el dolor de una vida traumática, superando los conflictos internos y apuntando a una vida con un futuro prometedor. El mismo que sin duda le seguirá esperando al canadiense, independientemente del camino que decida escoger. 

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