Sitges 2022 | 'Occhiali Neri': prostitutas de lujo y un asesino en serie, en la Italia de Dario Argento

El longevo cineasta presenta su nuevo filme en la 55ª edición, donde también ha recibido el Golden Honorary Award.
'Occhiali Neri' ('Dark Glasses')
'Occhiali Neri' ('Dark Glasses')
Cinemanía
'Occhiali Neri' ('Dark Glasses')

El patio de butacas del Auditori Melíá de Sitges se pone en pie para recibir al gran Dario Argento, mientras el cineasta agita efusivamente su Golden Honorary Award. Los aplausos no cesan durante largos minutos. Un momento que pasará a la posterioridad con la entrega de un merecido galardón a más de 50 años de carrera, donde el terror y la fantasía siempre han estado muy presentes, regalándonos obras de culto como Suspiria, Phenomena y Rojo Oscuro. 

Así, la 55ª edición del festival de Sitges también se transformaba en un marco inmejorable para la presentación del nuevo título del cineasta, Occhiali Neri (Dark Glasses). Un retorno del italiano a la dirección después de 10 años de ausencia, donde recupera los componentes del giallo que tan célebre han hecho su figura. Un filme que desprende el espíritu de Argento por los cuatro costados, a través de una atmósfera inconfundible, en la que se confabulan el sonido, la música y los movimientos de cámara. Terrore di calidad. 

“El cine de terror es como el mar. Sube y baja. Es como un movimiento que cambia en función del espíritu del mundo", señalaba Argento en la rueda de prensa de presentación de su filme. "Yo siempre he seguido mi estilo, y creo que, de este modo, también he inspirado a otros directores a la hora de hacer cine”.

Una femme fatale ciega 

Hay pocos miedos tan profundos como quedarse ciego. Una sensación horrible que todos hemos experimentado durante unos segundos al observar directamente el Sol, creándonos un gran desasosiego momentáneo. Un temor ante el que se da de bruces Diana, la protagonista de Occhiali Neri, después de ser partícipe de un eclipse, un augurio de la oscuridad que está a punto de llegar a su vida. 

La fobia reiterativa en los sueños de muchos espectadores acaba transformándose en la realidad de esta prostituta de lujo, interpretada por una femme fatale de la talla de Ilenia Pastorelli (4 mitades, Bendita locura), quien pierde la vista después de una persecución automovilística. A partir de entonces, la joven se transforma en el objetivo prioritario de un asesino de señoritas de compañía, quien no dudará en seguir cada paso de la nueva invidente.

En esta ocasión, Argento renuncia a los elementos de fantasía para centrarse en el puro suspense. Pero, lo que comienza como un filme entre el thriller y el terror psicológico, acaba transformándose en una historia de amor hacia la familia (incluida la canina) y un aprendizaje ante la adversidad. Y, sobre todo, en un relato que dejará perplejo a muchos espectadores. 

Una fatalidad que nos trae por el camino la presencia de Asia Argento, actriz y productora del filme e hija del director, con la que también trabajó anteriormente en Trauma (1993), El síndrome de Stendhal (1996), El fantasma de la ópera (1998), La madre del mal (2007) y Drácula 3D (2012). Un pequeño papel que demuestra lo fundamental que es que nos tiendan una mano en los peores momentos. 

A lo que no renuncia el cineasta, sin embargo, es a los baños de sangre y  las secuencias poco aptas para los estómagos más delicados. Además, los fóbicos a las serpientes también se retorcerán en las butacas. A sus 82 años, Argento continúa demostrando una enorme creatividad, a través de tramas que germinan en derroteros totalmente inesperados y que jamás tienen miedo a acudir a la idea más demente. Total, para ser un maestro del terror hay que tener poca vergüenza y arriesgar, y más si ya tienes una carrera consolidada. 

¿Quieres estar a la última de todas las novedades de cine y series? Apúntate a nuestra newsletter. 

Mostrar comentarios

Códigos Descuento