Muere a los 74 años Leon Vitali, actor de 'Barry Lyndon' y colaborador clave de Kubrick

Detrás de los directores siempre hay figuras en una posición secundaria y/o más anónima pero fundamentales para sus películas. En el caso del maestro Stanley Kubrick, una de ellas fue Leon Vitali, en origen actor y después principalmente colaborador y asistente personal del cineasta durante tres décadas, mano derecha que ha fallecido a los 74 años.

El perfil oficial de Kubrick en Twitter, destinado a mantener su legado, informó con pesar de la noticia del adiós de Vitali. "Con la mayor de las tristezas tenemos que decir que el pilar de un gran número de películas de Kubrick, Leon Vitali, falleció en paz anoche. Nuestros pensamientos están con su familia y con todos los que le amaban", expone el comunicado.

La carrera interpretativa de Vitali, británico, comenzó a principios de los 70, ceñida sobre todo a producciones televisivas. Su rol más significativo fue sin duda el de Lord Bullingdon en Barry Lyndon (1975), ya que posteriormente supeditó su carrera a la ayuda creativa a Kubrick. En el repaso a su trayectoria aparecen Victor Frankenstein (1977) y un pequeño papel en Juegos secretos (2006). También participó en la escena de la orgía de Eyes Wide Shut.

La descripción de la relación con Kubrick y de su cometido en sus obras, que más allá de Barry Lyndon empezó a cimentarse a raíz de que se encargara de seleccionar al niño que protagonizaría El resplandor (Danny Lloyd), se abordó en Filmworker. A la sombra de Kubrick (2017), documental de Tony Zierra exhibido en el Festival de Cannes. Precisamente, a modo de homenaje a Vitali, el perfil de Kubrick en Twitter recuerda que en esta propuesta puede descubrirse su completa dedicación a Kubrick y a sus creaciones.

(Festival Cannes)

Para ahondar más en el perfil de Vitali, asistente de dirección en El resplandor, La chaqueta metálica y Eyes Wide Shut, resulta interesante recuperar las declaraciones del mencionado Zierra en la presentación de su documental en Cannes. "Deseaba comprender por qué este actor, que había logrado el éxito internacional siendo muy joven, decidió un día dejarlo todo para convertirse en el asistente de Stanley Kubrick", decía Zierra acerca de las motivaciones que le guiaron en una entrevista en la web oficial del Festival.

"La relación entre Kubrick y Leon era rica, profunda y compleja. Fue evolucionando con el paso del tiempo, tornándose más creativa pero también más exigente. Descubrí que entregar su dedicación a Stanley Kubrick significaba abandonar muchas cosas. Sobre todo para un actor que había dejado atrás su carrera y el glamur que esta representa para dedicarse a un trabajo agotador pero necesario. Su relación era muy sólida, basada en una devoción absoluta a la realización de grandes películas", exponía Zierra.

Filmworker. A la sombra de Kubrick, relevante para los cinéfilos a los que les apasiona Kubrick, contó con testimonios como los del citado Lloyd, Ryan O’Neal, Matthew Modine y R. Lee Ermey.

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