'La sirenita': estos son los mayores cambios del remake de Disney respecto a la película original

El remake en acción real dirigido por Rob Marshall ha demostrado muchas ganas de actualizar el clásico.
Fotogramas de 'La sirenita (2023)' y 'La sirenita (1989)'
Fotogramas de 'La sirenita (2023)' y 'La sirenita (1989)'
Disney
Fotogramas de 'La sirenita (2023)' y 'La sirenita (1989)'

Empecemos por lo primero: la nueva versión de La sirenita dura 135 minutos. Dos horas y cuarto, que superan con contundencia los apenas 79 que necesitó el film animado de 1989 para adaptar el cuento de Hans Christian Andersen. 

Hay una diferencia de casi una hora, así que por fuerza esto debe haberse dedicado a profundizar o ampliar lo que sabemos de algunos personajes. Aunque no solo eso, también hay cambios que desafían la común creencia de que estos remakes son calcos de las películas animadas pasadas por el filtro CGI (que, en fin, algo de eso hay), y cambios que merecen ser examinados uno a uno.

Úrsula es Scar

Melissa McCarthy y Halle Bailey
Melissa McCarthy y Halle Bailey
Disney

La memorable villana de La sirenita, originalmente inspirada en Divine, vio ampliado con mucho su rol con respecto al cuento de Andersen. En dicho cuento, Úrsula era apenas una herramienta para que la Sirenita (sin nombre propio en el original) fuera presa del encantamiento según el cual perdería la voz y tendría piernas con las que bailar, aunque ese baile fuera enormemente doloroso para ella (esto no lo vimos en Disney, felizmente, como muchos otros detalles del aterrador relato de Andersen). Pero en la primera película Úrsula ascendió al rango de villana, tanteándose un parentesco con Tritón para pulir motivaciones.

Esto no llegó al guion definitivo, quedándose Úrsula como una freak que ha sufrido discriminación oceánica y que sin embargo, gracias a su villanía, justifica a sus opresores. En la nueva Sirenita se retomado la idea de que Úrsula es la hermana descarriada de Tritón (interpretados por Melissa McCarthy y Javier Bardem). Con lo que Úrsula, al quedar marcada por la sed de venganza, se termina pareciendo a villanos Disney como Scar, hermano de Mufasa en El rey león, o aquella Maléfica que se tomaba tan mal que no le invitaran a los bautizos en La bella durmiente.

Este encantamiento es una ruina

Halle Bailey es Ariel
Halle Bailey es Ariel
Disney

Del original de Andersen película animada y película live action han mantenido las condiciones leoninas del contrato que Ariel firma con Úrsula, aunque desde luego estas sean algo más livianas: Ariel (Halle Bailey) pierde la voz y gana piernas, sí, y sobre ella pende la amenaza de que si su amado no le da un beso de amor verdadero pasará a ser otra de las “pobres almas en desgracia” que forman el séquito de Úrsula. La cuestión es que, acaso volviendo sobre la mala leche de Andersen, el remake de Rob Marshall añade otra jugarreta al acuerdo de Úrsula.

Y es que Úrsula le hace olvidar a Ariel que necesita que Eric la bese. Se trata, verdaderamente, del rasgo más desconcertante de esta versión, por la ejecución (nada impide que los aliados de Ariel le recuerden el objetivo, pero al momento en que se lo recuerdan Ariel no se da por enterada) y porque a la larga tampoco afecta demasiado al desarrollo argumental que conocemos. ¿Quizá los guionistas pensaron que sería raro tener a esta Ariel, con mucha más agencia que la de dibujos animados, intentando besar al Eric de Jonah Hauer-King continuamente?

Scuttle ya no es una gaviota

Awkwafina es Scuttle
Awkwafina es Scuttle
Disney

No, no lo es. También le han cambiado el género para que le doble Awkwafina (lo que lo convierte en la mejor decisión jamás tomada en un remake de Disney), pero lo fundamental es que, en efecto, Scuttle ya no es una gaviota. La especie a la que pertenece este inquietante animal fotorrealista es un alcatraz norteño: un ave marina distinta que este remake prefirió usar por un motivo que caía por su propio peso. Y es que las gaviotas no pueden bucear pero los alcatraces sí, algo que le venía muy bien de cara a sumergir a Scuttle y darle más presencia en la trama.

Tres nuevas canciones

Halle Bailey y Jonah Hauer-King
Halle Bailey y Jonah Hauer-King
Disney

Es la adición más evidente en cuanto a metraje. Howard Ashman escribió las letras originales, pero como falleció en 1991 el encargado de la música, Alan Menken, tuvo que buscar un sucesor de cara a desarrollar una nueva partitura. El elegido fue Lin-Manuel Miranda, que escribió junto al veterano compositor otras tres canciones a unirse al icónico repertorio. Una de ellas denota especialmente que tenemos al creador de Hamilton in da house, y se titula en castellano Qué notición.

Qué notición es la última que suena: una especie de rap que comparten Sebastián y Scuttle (voces de Daveed Diggs, que salió en Hamilton, y en efecto Awkwafina, que es rapera). Las otras dos son Un mar inexplorado, que canta Eric en torno a su interés por el océano y lo que este esconde, y la mejor de todas: Por vez primera. Una canción de Ariel según pisa tierra que, curiosamente, interpreta cuando ha perdido la voz: se trata de un monólogo interno que solo escucha ella y, felizmente, nosotros.

Y dos que se van

Sin salir de la banda sonora, las canciones de nuevo cuño no son la única divergencia con respecto a la película del 89. Ya que, volviendo a las preexistentes, Menken y Miranda han introducido ciertos cambios en las letras de Pobres almas en desgracia y Bésala para rebajar el machismo y, en el caso de la segunda, darle una cierta importancia a la noción de consentimiento. También, en otro orden de cosas, la actualización del soundtrack ha pasado por eliminar dos canciones de la primera versión.

Una es Las hijas de Tritón, que era el primer número de todos y nos presentaba a Tritón y a su familia, además de la primera travesura de Ariel. Como ya no está el comienzo ha cambiado drásticamente y el primer número que escuchamos es Parte de él. Por último, tampoco hay ni rastro de Les Poissons, el acelerado número que protagonizaba Chef Louis mientras perseguía a Sebastián para cocinarlo. Chef Louis, además, es un personaje completamente inexistente en el remake.

Eric ya no solo es el príncipe azul

La reina Selina
La reina Selina
Disney

Finalizando esta lista de diferencias sonadas, algo que ya se sabía y que por supuesto ha causado reacciones enfurecidas: la madre de Eric tiene presencia en el remake y le pone rostro una actriz negra, Norma Dumezweni

Por eso se nos insinúa que Eric es adoptado sin que tampoco tenga mayor importancia en la trama, siendo más significativo que la reina Selina (tal es su nombre) sea tan controladora como el rey Tritón con respecto a Ariel. Algo que tienen en común los amantes, y que esperemos no se concrete en un odio prolongado hacia los suegros.

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