Ayer fue publicado el tráiler de Matrix Resurrections, cuarta (y tardía) entrega de una saga cuyos inicios se remontan a más de veinte años atrás, con un impacto cultural inigualable. Como cabía esperar, el avance era de lo más espectacular, pero también muy enigmático: algunos de los acontecimientos de la tercera película, Matrix Revolutions, parecían haber sido suprimidos por completo, y la sensación de que estábamos ante una ‘recuela’ al estilo de El despertar de la Fuerza o El regreso de Mary Poppins se intensificaba según íbamos haciendo acopio de todos los guiños que se le hacían al film inaugural. Y no obstante, sigue habiendo margen para la sorpresa y la especulación, a cuenta de los nuevos personajes y de detalles tan sibilinos como… el color de la imagen.
El look de Matrix Resurrections es muy distinto al de la trilogía. Pese a que hemos de entender que buena parte de lo visto en el tráiler acontece en Matrix (recordemos, la simulación en la que se halla atrapada buena parte de la humanidad dentro de un arraigado conflicto contra las máquinas), la interfaz de este programa informático ha cambiado de color. La tonalidad verdosa que le asociamos a ella ha sido sustituida por algo más genérico, generando dudas de si realmente este desorientado y barbudo Keanu Reeves se encuentra en Matrix o ha sido transportado a otro lugar. No obstante, la explicación de por qué Matrix Resurrections es tan poco verde se puede extraer del final de Matrix Revolutions.
En los últimos minutos de este film de 2003, Neo comprendía que el Agente Smith solo podía ser destruido si moría con él, y no dudaba en sacrificarse por la humanidad. Esto generaba grandes cambios en Matrix, intuidos a partir de un plano donde entre temblores de código veíamos a un gato (sí, muy parecido al que aparece al inicio del tráiler de Matrix Resurrections) yendo al encuentro de Sati (Tanveer K. Atwall), una de las protegidas del Oráculo. Hay quien cree que esta Sati es el personaje que encarna Priyanka Chopra Jonas en el avance de la cuarta entrega, pero más allá de las teorías hay que recordar que el reinicio de Matrix provocado por la destrucción mutua de Neo y el Agente Smith también provocó un cambio de color en la realidad simulada, mucho más luminoso.
Esto era comprobado algo más tarde, cuando el Arquitecto (Helmut Bakaitis) se reunía con la citada Oráculo (Mary Alice) y acordaban una tregua. A partir de ahora cada persona que quisiera salir de Matrix podría hacerlo con libertad y poco después de esa conclusión, en homenaje al heroico sacrificio de Neo, Sati creaba un hermoso amanecer. Si entendemos que Matrix Resurrections continúa estrictamente con los acontecimientos de Revolutions, el color del mundo virtual corresponde a esta nueva “actualización”, aunque también puede haber otro motivo, algo más metacinematográfico.
Aunque todos asociemos las escenas en Matrix a una fotografía verdosa, lo cierto es que originalmente solo Matrix Reloaded y Matrix Revolutions la mostraron, queriendo distinguir de forma más evidente el mundo real del virtual. La primera Matrix no había contado con esta diferencia, pero en una posterior reedición las Wachowski modificaron la paleta cromática para que se ajustara a lo visto en Reloaded y Revolutions, y la saga al completo tuviera coherencia visual. Que Resurrections haya retomado una factura menos diferenciada podría deberse, por tanto, a un homenaje al modo en que Matrix se estrenó originalmente, que por otro lado encaja con el expolio nostálgico que (esperamos equivocarnos) apunta a ser la película que se estrena el 22 de diciembre.
¿Quieres estar a la última de todas las novedades de cine y series? Apúntate a nuestra newsletter.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios