Tras meses de críticas feroces contra Netflix por la inclusión de publicidad en uno de sus planes, la compañía ha demostrado el éxito de este nuevo sistema en la búsqueda de suscriptores que se habían mantenido alejados hasta el momento. Un retorno al modelo televisivo tradicional que, contra todo pronóstico, está recibiendo una mejor acogida de lo esperado y ha hecho que Disney+ y Prime Video cambien su estrategia de cara a un futuro.
La consultora audiovisual GECA ha elaborado un estudio con una muestra de 2.000 usuarios con acceso a todas las plataformas de video on demand en España, que analiza cómo se desenvuelven en el entorno digital audiovisual actual y su posible aceptación ante el modelo publicitario.
En enero de 2023, un estudio desarrollado por HelloSafe ya revelaba que Prime Video superaba a Netflix en suscriptores en España. Más de medio año después, el análisis de GECA reafirma que el servicio de streaming continúa manteniendo esta posición privilegiada, aunque sufre un descenso en su cuota de mercado.
De esta forma, Prime Video está presente en el 66,3% del total de usuarios con acceso a las diferentes plataformas de video on demand en España, mientras que Netflix acorta distancias con un 65,7%. Esto supone un crecimiento para el gigante rojo del streaming después de los augurios de un desenlace fatal con la llegada de la publicidad, la subida de precios y el cambio en la normativa sobre cuentas compartidas.
Por su parte, Disney+ y HBO Max continúan creciendo con 37,9% y 32,5%, respectivamente, mientras que otros servicios patrios como Mitele Plus continúan apuntando mínimos con un 1,7%. Asimismo, RTVE Play brilla como la plataforma con servicios gratuitos de mayor éxito entre los usuarios con un 25,6% del total, seguida de Atresplayer (22,3%) y Pluto TV (21,3%).
Lejos de perjudicar a Netflix, la publicidad mejora sus cifras
Más allá de las reticencias iniciales hacia la inclusión de publicidad en Netflix, la compañía ha demostrado que el público está dispuesto a pagar por contenidos con anuncios si esto supone un descenso de los precios. En estos momentos, la tolerancia a la publicidad entre los usuarios españoles se sitúa por encima del 50% por primera vez desde que Netflix lanzó su plan con anuncios.
En España, el 13,9% de los suscriptores de Netflix ya han contratado el plan estándar con anuncios, según GECA. De hecho, la mitad de las contrataciones de este modelo resultan ser nuevos usuarios que jamás habían contratado anteriormente los servicios de la plataforma.
Por su parte, el plan premium continúa perdiendo adeptos y los planes estándar y básico concentran el grueso de usuarios. Al menos por el momento. Recientemente, Netflix anunciaba la eliminación del plan básico para nuevos usuarios u otros que decidan cambiar de plan, estando disponible actualmente tan solo para aquellos que ya se habían dado de alta en el pasado.
No obstante, el plan con anuncios continúa siendo el menos popular en la plataforma por detrás de los otros tres aún existentes, como también recoge el nuevo estudio. Una información que conocíamos por investigaciones anteriores realizadas por las compañías Evercore y Antenna. Si bien es cierto, este nuevo modelo ya supone el 30% de las nuevas altas en los 12 países en los que está disponible.
Disney+ y Prime Video: rivales que copian este modelo
El triunfo del modelo publicitario en Netflix ha provocado que las compañías competidoras imiten el mismo patrón, siendo especialmente descarado el caso de Disney+. Tan unos días después de los últimos cambios en los planes de Netflix, la plataforma de la Casa de Mickey Mouse presentaba exactamente los mismos tres modelos de suscripción y añadía la publicidad.
De igual forma, Prime Video comunicaba que la versión con anuncios será la opción por defecto para los usuarios que se hayan suscrito a través de Amazon Prime, el paquete de ofertas que incluye envíos gratis, suscripción a Amazon Music y otras ventajas relacionadas con el emporio de Jeff Bezos. Unos pasos que podría seguir también próximamente Apple TV+,tras anunciar una subida de precios para igualarse al resto de competidores.
Y es que el pastel del streaming resulta demasiado pequeño para tantas compañías que comienzan a recular hacia el modelo publicitario tradicional para superar las pérdidas ocasionadas en una industria que fluctúa constantemente. ¿Estamos ante el cambio de un nuevo paradigma?
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