En pleno Parque Natural de la Albufera, frente a las aguas del mar Mediterráneo, se ubica el Parador de El Saler, rodeado de dunas y pinares. El hotel se integra a la perfección en este espectacular paisaje de la provincia de Valencia y desde él se puede acceder, a través de una pasarela, a la playa de la Devesa.
Por otro lado, este alojamiento lleva la sostenibilidad y la preservación del entorno natural como bandera, y por ello desarrolla proyectos de eficiencia energética, recuperación de especies en peligro de extinción y reducción de plásticos y desperdicio alimentario.
En esta ocasión, junto a la ONG Xaloc Mar, ha puesto en marcha 'El Parador de las Tortugas', el primer santuario para la tortuga mediterránea (Testudo hermanni). Esta especie protegida es una de las más emblemáticas del litoral valenciano y en los últimos años ha visto degradado su hábitat natural por la construcción masiva en costas y parajes naturales que amenazan su supervivencia.
Un espacio seguro para las tortugas mediterráneas
A partir de ahora en el Parador de El Saler las tortugas mediterráneas cuentan con un espacio seguro donde puedan acostumbrarse de manera progresiva a volver a vivir en libertad, para hacer una reintroducción en el medio más gradual y fiable, aumentando de manera considerada su índice de supervivencia.
Desde la ONG Xaloc Mar insisten en la importancia de conocer la diferencia entre estas tortugas terrestres autóctonas y otras especies invasoras como la Trachemys scripta, por lo que este santuario es un espacio controlado y protegido para ejemplares previamente seleccionados y no se permite la libre introducción de animales ajenos a este programa de conservación de la biodiversidad.
Así es el Parador de El Saler
El Parador de El Saler puede presumir de estar en una ubicación privilegiada. Dentro de un parque natural y junto a una playa, el hotel presenta un diseño elegante y con poca altura, para no desentonar demasiado en el paisaje. Además, cuenta con campo de futbol, piscina exterior, spa, gimnasio, parking exterior, parque infantil y un campo de golf donde está la llamada Natursenda, un recorrido de dos kilómetros para conocer de primera mano el ecosistema de la zona.
Por otro lado, dispone también de dos restaurantes donde probar los deliciosos arroces valencianos y otros platos del recetario tradicional levantino. Complemento al restaurante principal, La Barraca del Mediterráneo es un espacio gastronómico con una carta de carácter más informal representativa de la cocina valenciana.
Comentarios