Lamborghini Aventador LP 700-4, un récord absoluto

Se acabaron las esperas, las fotos filtradas y las elucubraciones sobre cómo será el sustituto del modelo más emblemático procedente de Sant'Agata Bolognese. El Murciélago, que ha estado a la venta durante más de nueve años tras remplazar al emblemático Diablo y ha vivido el lento repunte de la compañía tras estar al borde de la quiebra, deja de ser presente para constituir un capítulo en la historia del automóvil. El presente y el futuro ahora se llama Aventador y su primera versión se denominará LP 700-4. Ya imaginarán el porqué.

Efectivamente. Lamborghini, bajo el paraguas del grupo Volkswagen con el que su economía se mantiene estable desde 1998, continuará distinguiendo el nombre de sus modelos por la potencia y por el tipo de tracción que ofrecen. El nuevo Aventador LP 700-4, como bien indica su nombre, contará con un motor 6.5 V12 con 700 cv de potencia a 8.250 vueltas y tracción a las cuatro ruedas.

De esta forma, conserva la arquitectura, la posición central trasera y la cilindrada del último Murciélago (el LP 670-4 Superveloce), pero supera en treinta caballos la cifra de potencia y consigue bajar de la barrera de los tres segundos en términos de aceleración. Según sus ingenieros (tan obcecados como antaño en buscar los límites de la física), los 690 newtons/metro del LP 700-4 serían capaces de realizar un sprint hasta los 100 km/h en 2,9 segundos, exactamente tres décimas menos que el SuperVeloce y medio segundo menos que el LP 640.

Y el peso, como es lógico, ha sido determinante en este sentido. Conseguir un peso pluma en una carrocería de casi cinco metros de longitud era y sigue siendo un reto para cualquier ingeniero. El LP 700-4 mide 4,78 metros de longitud y ha tenido que valerse de una estructura realizada en fibra de carbono y a unos subchasis de aluminio para conseguir la asombrosa cifra de 1.575 kilos sin conductor.

Unos cuantos kilos se han podido ahorrar también gracias a una solución referida a su caja de cambios. Lamborghini ha decidido sustituir una posible caja de doble embrague del grupo VW por un cambio robotizado de siete marchas, denominado ISR (Independent Shifting Rods) con sincronizadores simultáneos, lo que ofrece una ligereza valiosísima y unas transiciones de marchas casi inapreciables (50 milisegundos según el fabricante). Esta caja de cambios se podrá controlar desde el puesto de conducción con diferentes modos de conducción, manuales y automáticos para carretera o circuito, y contará con un sistema de salida rápida tipo Launch Control.

La tracción a las cuatro ruedas sigue siendo posible gracias a un embrague multidisco Haldex entre ambos ejes y a un autoblocante en el eje trasero.

Entre otras curiosidades, merece la pena comentar que el consumo mixto de este deportivo ha sido homologado en 17,2 litros, lo cual deja una autonomía de aproximadamente 300 kilómetros si tenemos en cuenta la capacidad de su depósito (90 litros). La carrocería se podrá elegir entre los colores clásicos del fabricante italiano, con hasta 13 tonalidades diferentes.

Los más de 300.000 euros (impuestos incluidos) que costará el Aventador hacen que entre en una categoría de automóviles casi inalcanzables, en la que entrarían, además del Bugatti Veyron, el Lexus LFA o el Ferrari FF, éste último con un precio ligeramente superior.