'La noche más oscura', bajo sospecha en el Senado de EE UU

Está claro que el filme de Kathryn Bigelow no hay caído nada bien en Washington: los contactos con la CIA de la directora y del guionista Mark Boal serán investigados oficialmente. Por CINEMANÍA
'La noche más oscura', bajo sospecha en el Senado de EE UU
'La noche más oscura', bajo sospecha en el Senado de EE UU
'La noche más oscura', bajo sospecha en el Senado de EE UU

Por una vez, los espectadores españoles podremos ver una de las películas de la temporada antes que en EE UU. La película es La noche más oscura (lo nuevo de Kathryn Bigelow) , que aquí llega a las pantallas el viernes mientras que, al otro lado del charco, aparecerá el próximo fin de semana. Dicho adelanto nos valdrá para dos cosas: para gozar de una Jessica Chastain estupenda en su rol de espía peligrosa, y para ver con algo de objetividad las antipatías que el filme ha despertado en el mundillo político estadounidense. Si la semana pasada anunciábamos que tanto los Demócratas como los Republicanos están que trinan con Bigelow y su cinta, sobre todo por las referencias a la tortura de presos de Al Qaeda por parte de la CIA, hoy nos enteramos de que el senado de EE UU interrogará a la directora y a Mark Boal (su guionista de cabecera).

Según informa la agencia Reuters, el Comité de Inteligencia de la Cámara Alta de EE UU quiere sentar a Bigelow y Boal en el banquillo para que ambos declaren sobre sus fuentes. Según documentos revelados por la web conservadora Judicial Watch, tanto el guionista (que ejerció como reportero de guerra antes de pasarse al cine) como la directora tuvieron acceso a los archivos de la CIA y del Pentágono, algo que no ha sentado nada bien a altos cargos tanto militares como civiles. Reuters avisa de que la investigación tendrá dos vertientes: primero, se indagará sobre cómo accedieron Bigelow y Boal a dicha información. Y, además, se harán pesquisas sobre qué agentes de la CIA proporcionaron las descripciones de las sesiones de tortura (o, en jerga oficial, de "interrogación asistida"), cuya crudeza es uno de los puntos fuertes del filme.

Por ahora, la CIA se niega a hacer declaraciones sobre el caso, salvo un comunicado en el que indica que el filme es "una dramatización", y que la agencia de espionaje "no tuvo ningún control sobre el producto final". Pero todo indica que el Comité de Inteligencia busca debilitar a su actual jefe en funciones Michael Morell. Morell, subdirector de la 'Compañía' durante los años en los que transcurre La noche más oscura, es actualmente el favorito para suceder al general David Petraeus, cuya situación está muy comprometida por un escándalo sentimental y relacionado, también, con la divulgación de información de riesgo.

Por otra parte, La noche más oscura ha recibido críticas desde todos los sectores del espectro político. Las recientes acusaciones de plasmar datos "inexactos" sobre el uso de la tortura son la guinda de una tarta que comenzó durante la posproducción de la película. Entonces, Bigelow fue acusada desde el Partido Republicano de preparar un panegírico pro-Obama, el cual consagraría al mandatario como el presidente que logró acabar con Osama Bin Laden. Después, fue el ala izquierda del Partido Demócrata la que arremetió contra la cineasta, haciendo hincapié en su presunta actitud a favor de la tortura en la lucha contra el terrorismo. A tanto llegó el revuelo que el estreno de la cinta en EE UU se ha aplazado varias veces para acallarlo.

En todo caso, nosotros podemos decir que ninguna de las partes implicadas sale bien parada en La noche más oscura: ni el ejército de EE UU, ni la propia CIA ni, por supuesto, los militantes islamistas. Por otra parte, lo que se figura como una guerra entre lobbies políticos y castrenses a cuenta de la película sólo podrá beneficiar a esta en taquilla. Porque, recordemos, toda esta controversia significa un acceso para el filme a los titulares de la prensa generalista. Y, a la postre, eso es publicidad gratis.

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