Un conductor imputado por cuadruplicar la tasa de alcohol, no usar el cinturón e irregularidades en el carné
Un conductor ha sido imputado por la Policía Foral por conducir con una tasa de alcohol cuatro veces superior a la autorizada, y otros dos por duplicar el límite máximo permitido. También han sido imputados dos conductores a los que les había sido retirado el permiso por decisión judicial.
Según ha informado el Gobierno en una nota, una patrulla de la Policía Foral observó en Pamplona, el día 2 de julio, un coche que circulaba de forma irregular, por lo que ordenaron a su conductor, un vecino de Alsasua de 39 años, que se detuviera. Cuando lo hizo, comprobaron que no hacía uso del cinturón de seguridad y que presentaba síntomas de ingesta de alcohol, multiplicando por cuatro la tasa máxima autorizada en la prueba que le fue practicada. También fue imputado por irregularidades en el permiso de conducir.
Un vecino de Zizur Mayor, de 21 años, fue imputado el día 3 de julio por conducir con una tasa de alcohol que duplicaba la permitida e influenciado por el consumo de bebidas alcohólicas. Los agentes que atendían un control preventivo de alcoholemia instalado en Galar dieron el alto a un vehículo que se les aproximaba a gran velocidad, y al detenerse vieron que su conductor presentaba síntomas de intoxicación etílica, con dificultades para mantener el equilibrio. La prueba reveló que duplicaba el límite máximo autorizado.
También duplicaba la tasa un vecino de Sarriguren de 25 años que, en un control preventivo situado en Galar, fue sometido a la prueba con un resultado superior a 0,60 miligramos por litro de aire espirado.
Por otra parte, dos vecinos de Pamplona de 50 y 38 años fueron imputados el 1 y el 4 de julio, respectivamente, por conducir a pesar de que sus carnés habían perdido la vigencia por orden judicial. En el primer caso, una patrulla de la Policía Foral reconoció en Beriain a un conductor que, tras ser identificado, se comprobó que le había sido retirado el permiso.
El segundo imputado detuvo su vehículo a unos metros del lugar donde había sido instalado un control de seguridad ciudadana en Pamplona. A través de la identificación se supo que conducía sin licencia, ya que le había sido retirada por el juez.