Vizcaya

Blázquez anima a fortalecer las instituciones democráticas y caminar "juntos" por el camino de la paz

El obispo de Bilbao, Ricardo Blázquez, animó hoy a "fortalecer" las instituciones democráticas y caminar "juntos" por el camino de la paz e hizo un llamamiento para que "desaparezcan definitivamente toda amenaza de violencia".

Blázquez realizó esta reflexión en el transcurso de la misa que se celebró hoy en la Basílica de Begoña en Bilbao para recordar el 50 aniversario de la muerte del que fuera lehendakari, José Antonio Agirre.

El acto congregó a los ex lehendakaris Carlos Garakoitxea, Juan José Ibarretxe, y José Antonio Ardanza, que reaparecía, por primera vez en público, después de sufrir un infarto de corazón. Por su parte, el lehendakari, Patxi López, no estuvo presente ya que se encuentra de viaje oficial en Brasil.

La misa también reunió al alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna, los tres diputados generales, el presidente del EBB del PNV, Iñigo Urkullu, el secretario general del PP vasco, Iñaki Oyarzabal, la portavoz del Gobierno vasco, Idoia Mendia, y el presidente de la Fundación Sabino Arana, Juan María Atutxa, entre otros.

En su homilia, Blázquez aprovechó esta conmemoración para honrar la figura de Agirre y mostrar su respecto a los cuatro lehendakaris vivos. En este sentido, deseó la "pronta recuperación" de José Antonio Ardanza, que sufrió recientemente un infarto.

Blázquez expresó su apreció a los representantes de las instituciones autonómicas, de los territorios históricos y de los ayuntamientos.

El prelado recordó que el 7 de octubre de 1938 tuvo lugar en Gernika el juramento del primer lehendakari y que, desde la Basílica, después de haber rezado a la Virgen de Begoña Patrona de Bizkaia, salió José Antonio Agirre hacia la Casa de Juntas. Blázquez señaló que se había roto "dramáticamente" la convivencia del pueblo, y se estaba inmerso "en una terrible guerra fratricida".

"Fueron tiempos convulsos y penosos, de un ingente sufrimiento. El hecho de haber sido Aguirre el primer lehendakari -y primero significa no sólo el que comienza una serie sino también el que abre un camino- ayuda a comprender que se hayan sentido concernidas todas las instituciones constituidas democráticamente y que sus representantes se hayan congregado esta mañana, trascendiendo la adscripción política particular", agregó.

Blázquez aseguró que José Antonio Aguirre fue "lehendakari de todos" y destacó que los efectos de la guerra "pesaron duramente también sobre él y su familia en largos años de exilio".

"toda amenaza de violencia"

"Aquí, en presencia de la Amatxo de Begoña, queremos fortalecer nuestras actitudes de revisión sincera, de arrepentimiento, de purificación y de reconciliación. La paz ha ganado desde hace años ya nuestra sociedad y nuestras instituciones.¡Que desaparezcan definitivamente toda amenaza de violencia, las asechanzas a la libertad y el peligro de perder injustamente la vida! Todos estamos convocados al trabajo por el bien común animado por la esperanza", afirmó.

Asimismo, destacó que estas efemérides son "una oportunidad preciosa" para revisar "lo que hicimos bien y mal, para aprender también de los fracasos, para fortalecer las instituciones democráticas y para caminar juntos por el camino de la paz".

Blázquez, que apeló a que nuestra vida "difunda esperanza y no desencanto, concordia y no cizaña, elevación moral y no degradación", recordó también su homilía que, dentro de pocas semanas, comenzará el ministerio episcopal en Valladolid.

Asimismo, subrayó que el lehendakari Agirre "unió la fe cristiana, la acción política y una honda preocupación social". En concreto, recordó que fue presidente de las Juventudes Católicas de Bizkaia.

Por último, destacó en su homilia la importancia de "la justicia, el amor, la libertad y la exclusión de amenazas, el respeto de las personas y la paz, la educación y la sabia ordenación de la sexualidad, el matrimonio y la familia, la defensa y el cuidado del ser humano desde el origen hasta el final".