Lars Von Trier: "Soy un idiota, no debería hablar nunca"

"Soy un idiota que no debería salir de Dinamarca y no hablar nunca con nadie". Son palabras de Lars Von Trier en una reciente entrevista en la que el director danés pide perdón por sus declaraciones del martes en el Festival de Cannes. Tras haber sido vetado a perpetuidad hoy mismo por la junta de directores del certamen, el autor de Melancholia reconoce en este encuentro, que nos llega vía 24 frames, que afirmar su comprensión hacia Adolf Hitler y su admiración hacia ciertos aspectos del nazismo no fue una buena idea.

"Afirmo sinceramente que no sé lo que me dió", comenta Von Trier acerca de su arrebato en la Croisette. Y prosigue: "Fui muy sarcástico y maleducado, pero eso es muy danés. Lamento profundamente haber sido malinterpretado". Así mismo, puntualiza que el Holocausto le parece "uno de los peores crímenes cometidos en la historia de la Humanidad" y que no simpatiza con Hitler "ni por un segundo". Respecto del comunicado que emitió ayer, pidiendo disculpas formalmente por sus palabras, comenta: "A estas alturas, las disculpas no tienen sentido. Es como decir 'He hecho algo mal', pero ¿de qué sirve eso?". Según Von Trier, la únca razón por la que publicó la nota fue la "prevención de daños".

"No merezco ganar la Palma de Oro", remacha el cineasta. Quien también puntualiza que considera al arquitecto nazi Albert Speer y a la directora de El triunfo de la voluntad Leni Riefenstahl como "grandes artistas que hallaron su lugar bajo una dictadura". "Hay gente que quisiera ver cómo me desdigo de eso último, pero no puedo hacerlo por amor a la verdad", concluye.

Ante estos sinsabores, Von Trier afirma estar más decidido que nunca a dedicarse a un género en el que ya ha hecho sus pinitos: el cine pornográfico. "Nunca verás a una porno star corriendo Croisette abajo gritando: 'Lars ha dicho esto' o 'Lars ha dicho lo otro", afirma.