A Coruña

El acusado de apuñalar a un vecino en A Coruña tras una discusión de tráfico alega que se le "cruzaron los cables"

Un hombre acusado de asestar una puñalada a otro tras discutir por asuntos de tráfico en A Coruña ha alegado que en ese momento se le "cruzaron los cables" y sacó la navaja que llevaba consigo para "asustar" a la víctima, quien al "abalanzarse" sobre él "se clavó" el instrumento cortante.

Así lo ha manifestado en el juicio celebrado en la Sesión Segunda de la Audiencia Provincial de A Coruña el hombre que se enfrenta a una pena de nueve años de prisión por un delito de homicidio en grado de tentativa en relación a unos hechos ocurridos el 8 de junio de 2018 en el barrio de los Mallos de A Coruña y en concreto en la calle Mariscal Pardo de Cela.

En dicha calle, ambos hombres habrían tenido una discusión por asuntos con el tráfico que acabó con un acuhillamiento que provocó a la víctima una herida de gravedad en la zona de la axila, según ha declarado ante el tribunal.

En su declaración, el acusado ha manifestado que fue la víctima quien le pegó un bocinazo, lo insultó y, a continuación, le propinó primero un golpe a él y después otro a su mujer. Tras presuntamente proferirse una serie de insultos, el procesado ha reconocido que en ese momento, "después de llevar todo el día trabajando", se le "cruzaron los cables" y sacó la navaja para "asustar" al otro hombre.

"Yo la saqué (la navaja) y se la clavó él", ha relato el procesado, quien asegura que fue la víctima quien "se abalanzó" hacía él y entonces fue cuando "se clavó" la navaja.

"FUE UN MILAGRO"

Sin embargo, el relato del procesado difiere del expuesto por la víctima, quien sí ha reconocido haberle llamado la atención por la lentitud a la que estaba yendo el procesado en su coche, pero niega haber tenido algún tipo de enfrentamiento con él.

Según su versión, tras llamarle la atención por su modo de conducción, asegura que seguidamente metió el coche en el garaje. Todo aconteció, según declara, a su salida, cuando se acercó hasta el acusado al ver que "zarandeaba" a uno de sus hijos menores.

"Ví que se ponía nervioso y que hacía un movimiento extraño. Levanté el brazo para protegerme porque pensé que me iba a dar un puñetazo y de repente ya noté que estaba sangrando", ha relatado la víctima, un joven que asegura que "en ningún momento" tuvo "el más mínimo enfrentamiento o roce" con el procesado.

La víctima ha indicado que "fue un milagro" que sobreviviese, pues el médico le dijo que la herida "pudo haber sido mortal". "Me quedé a un centímetro del pulmón y del corazón", añade.

Ante estos hechos, la Fiscalía solicita para el procesado una pena de nueve años de prisión por un delito de homicidio en grado de tentativa. El fiscal también solicita que pague una indemnización de 33.170 euros a la víctima.