Con la llegada del buen tiempo se compra ropa de temporada y se saca la que estaba guardada durante el mal tiempo.
Más de la mitad de la población lleva a cabo 2 cambios de armario cada año. Normalmente con la llegada del verano y del invierno. En cada uno de ellos se suelen desechar cinco prendas que ya no se usan, según un estudio realizado por Ariel.
El informe también afirma que la vida media de la ropa se sitúa entre los 2 y 3 años, según un 41,3% de los encuestados. En contraste, tan sólo el 2,2% utiliza la ropa una única temporada.
En un cambio de armario lo principal es lavar toda la ropa, la que se va guardar y la que se ha sacado para colgar.
El orden del armario
Es reflejo del orden en la vida. Un principio del Feng Shui asegura que tener los objetos de la casa ordenados significa tener las ideas claras. Organizar el armario y la ropa puede ser incluso una acción terapéutica, ya que ayuda a planificar mejor la vida, simplificando y ahorrando tiempo.
La forma de vestir
La psicóloga Begoña Gilbert afirma que la forma de vestir condiciona la aceptación social de una persona. A mayor aceptación, aumenta la autoestima, que se refleja en un bienestar emocional.
Los madrileños, seguidos de los catalanes, son los españoles que más importancia dan a la limpieza y al cuidado de la forma de vestir.
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