Las Palmas

Los centros de salud de Canarias inician la vacunación de la gripe, que puede reducir hasta en un 80% las muertes

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CEDIDA POR EL GOBIERNO DE CANARIAS

Así, la vacuna está recomendada en mayores de 60 años, enfermos crónicos de cualquier edad, embarazadas, profesionales sanitarios y personal de otras profesiones como policías y bomberos, todo ello con el objetivo de reducir la mortalidad y morbilidad asociada a la gripe y el impacto de la enfermedad en la comunidad, según informó el Gobierno canario en nota de prensa.

Por ello, añaden, están dirigidas fundamentalmente a proteger a las personas que tienen un mayor riesgo de presentar complicaciones en caso de padecer la gripe, así como a las que pueden transmitir la enfermedad a otras que tienen un alto riesgo de complicaciones y a las que, por su ocupación, proporcionan servicios esenciales en la comunidad.

Al respecto, indican que la vacunación podría reducir entre un 75 y 80 por ciento las muertes que se producen a consecuencia de esta enfermedad, situándolas entorno a los 2.000 fallecimientos anuales directos en España, si bien matizan que esta horquilla varía en datos globales de los 1.400 hasta los 4.000 fallecimientos que se asocian a factores de comorbilidad.

Por otro lado, exponen que en la temporada 2016/2017, la gripe alcanzó una incidencia máxima de 2.697 casos en la semana 48, siendo esta similar a la alcanzada en la temporada anterior en la semana 7. También en la temporada pasada se observó un adelanto en cuanto al aumento del número de casos de gripe en relación a la temporada previa de 2015/16.

En el caso de Canarias, el nivel de intensidad de la actividad gripal registrado, desde el inicio de la temporada 2016-2017 hasta la semana 20 del 2017 (del 15 al 21 de mayo), fue bajo, por lo que se asocia a una circulación mayoritaria de virus de la gripe A(H3H2).

Además, apuntan que en la temporada 2016-2017 la onda epidémica se inició diez semanas antes que en la anterior temporada 2015-2016 y el periodo epidémico fue más corto, con una duración de tres semanas. La incidencia también fue menor en la 2016-2017 porque el pico máximo de la temporada fue de 145,5 casos por 100.000 habitantes, respecto al 255,9 de la temporada anterior, entre otros datos.