Vídeo del día: Acoso callejero a la Princesa Leia

Destinada a levantar polémica, esta parodia de la cámara oculta que denunciaba el acoso callejero al que se ven sometidas las mujeres en Nueva York le da un giro galáctico.
Vídeo del día: Acoso callejero a la Princesa Leia
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Vídeo del día: Acoso callejero a la Princesa Leia

Hace unas semanas, el vídeo de cámara oculta 10 horas de paseo por Nueva York siendo mujer causó gran revuelo en las redes sociales con su evidencia directa de un tema tan serio como el acoso verbal al que se pueden ver sometidas las mujeres durante su día a día. Una joven grabó a su paso por las calles de la ciudad cómo era increpada en repetidas ocasiones por diferentes hombres con llamadas, silbidos, supuestos piropos, toda clase de comentarios no solicitados e incluso comportamientos inquietantes. El vídeo ha creado sensibilización y debate acerca de una dimensión del acoso sexual sobre la que se suele pasar por alto, pero así como también ha recibido algunas críticas no se ha librado de ser objeto de parodias. La velocidad de internet es prodigiosa en este campo y en Are We There Yet? ya tienen lista su propia versión con potencial para convertirse en viral —se ha ventilado el millón de visitas en medio día— usando la fórmula mágica de tema de acualidad + Star Wars.

Maniobra aparte, hay que reconocer que 10 horas de la Princesa Leia paseando por Nueva York, dirigido por Josh Apter, es muy divertido. En él, Leia Organa (Michele McNally) graba con cámara oculta cómo sufre el acoso de representantes masculinos de todas las razas y especies de la galaxia durante un simple paseo por Manhattan. Además del consabido desfile de vestuario y disfraces de personajes de la saga, lo mejor del vídeo puede estar en su utilización de los cortes de audio originales de las películas, demostrando que determinados diálogos y palabras pueden cambiar completamente de significado —y efecto sobre el interlocutor— según la situación y el marco en el que se dicen. Al final, la parodia consigue resaltar un aspecto que varias voces no llegan a comprender del vídeo original: el problema del acoso no está precisamente en el tipo de palabras "suaves" o "agradables" que le decían a la chica del primer vídeo. Para el caso, habría dado lo mismo que fueran un par de jawas gritando "Utinni!!".

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