25 minutos con Jane Badler, la Diana de 'V'

La cadena TNT ha convocado esta mañana a CINEMANÍA y otros medios en un céntrico hotel madrileño para entrevistar a Jane Badler, la malvadísima Diana de V que, 30 años después, vuelve a enfundarse el mítico traje rojo en la nueva versión de la serie. La actriz, cuyos papeles durante este lapso de tiempo en el cine (Misión imposible) o en series (Falcon Crest) no han conseguido reportarle la fama que le brindó V, regresa a la serie como madre de Anna (Morena Baccarin), a la que considera "una digna sucesora en el cargo". Somos seis periodistas a repartirnos los 25 minutos de entrevista. Casualmente todos andamos por la treintena así que cuando Jane Badler aparece en la sala, despampanante, más joven aún que en los 80, todos nos sentimos de pronto como si volviésemos a tener seis años y estuviésemos merendando frente al televisor con cara de susto. En un momento dado, uno de los periodistas le explica esta sensación y le pide que nos diga unas palabras como si fuese Diana. Ella se apoya en el respaldo de la silla, pone esa mirada que nos hacía escondernos debajo del mantel y, apuntándonos con el dedo índice, grita: "Más os vale ir con cuidado, os podría comer a todos".

Revivals intergalácticos aparte, Jane Badler demuestra ser una mujer encantadora. Se confiesa fan de las tapas y nos cuenta que antes de volar a España le ha salido un admirador madrileño vía Facebook que le proponía pasar un fin de semana en su finca con caballos y coches lujosos. Jane tiene ese punto de humildad de las estrellas caídas (se fue a Australia por amor y allí estuvo trabajando en teatros y cabarets) que vuelve y se emociona verdaderamente cuando alguien la reconoce como el icono que es. "Fui yo la que le propuse al productor del remake de V que me fichase. Le dije que podía entrevistarme con él porque justo en ese momento estaba en Los Ángeles. Y era mentira. Volé desde Australia sólo para conocerlo". Parece sincera. Cuando le preguntamos si se ha sentido encasillada después de interpretar a la malvada Diana no se lo piensa dos veces: "Sí, mucho –dice–, y lo he llegado a pasar muy mal, pero creo que al final ha sido muy positivo para mí porque me esforcé en hacer otras cosas. Nunca me quedé atascada".

Jane Badler se ríe de los cardados que llevaba en la primera V. La moda ochentera le hace gracia y le parece sexy. Es tan maja que no ni siquiera le molesta que le preguntemos por la escena del ratón. "Tardamos siglos en hacerla porque no teníamos los efectos especiales necesarios (para dar fe, el vídeo de la escena más abajo). Yo pensaba '¿por qué tenemos que hacer esto?'. No tenía ni idea de que sería la escena por la que todo el mundo me recordaría".

Podréis leer la entrevista completa (con las preguntas que nos pedisteis que le hiciéramos a través de Facebook) en el número de marzo de CINEMANÍA.