Es fácil refrescarse siendo niño
NOTICIA
13.07.2007 - 03:33h
Los 27 grados de máxima que alcanzó ayer Bilbao destapó la sudoración del viandante. Los mayores sólo aspiraban a encontrar una sombra para aliviarse. Los niños lo tienen más fácil. En la fuente del Museo Guggenheim, fuera camiseta, y chapuzón al canto.