Artes

Fernando Vicente, lecciones de anatomía y sensualidad

'Interiores', una de las obras de Fernando Vicente exhibidas en 'El eterno femenino'
© Fernando Vicente. De la serie 'Venus'

La crudeza de la víscera, la aparente fragilidad de la columna vertebral, el entramado de arterias y venas que transportan la sangre, los músculos en tensión. En la obra de Fernando Vicente (Madrid, 1963) la intimidad de la anatomía queda al aire, pero lo que podría limitarse a un acercamiento científico desemboca en una sorprendente sensualidad.

Aunque en ocasiones parezcan tenebrosas por la serenidad con que se llevan la mano al pecho abierto, las mujeres que representa son hermosas y sofisticadas, entendedoras de la poética de la naturaleza. El artista es capaz de ligar dos mundos tan ajenos en ilustraciones y pinturas que lo han convertido en uno de los grandes ilustradores españoles actuales.

La galería madrileña La Fiambrera presenta, a partir del 18 de septiembre y hasta el 24 de octubre, El eterno femenino, una muestra que recopila trabajos recientes e inéditos de Vicente. El espacio expositivo reúne 26 piezas de populares colecciones de pin ups, con el característico sello del autor, y 14 pinturas de la serie Venus.

La exquisitez de los clásicos

Autodidacta y en activo desde los años ochenta, sus obras han ilustrado portadas de revistas, artículos de prensa, portadas de discos y libros... Confiesa que la ilustración surge a partir del encargo comercial, pero que la pintura es su vocación, un "autoencargo" con el que desarrolla sus "obsesiones". En ambos casos es fiel al acrílico y trabaja siempre de pie frente al caballete.

Venus contiene en los temas y en la forma la exquisitez de los clásicos. El artista hace guiños a cuadros del renacimiento como La dama del armiño de Leonardo da Vinci o El nacimiento de Venus de Botticelli, a Las tres Gracias —personajes mitológicos interpretados por maestros como Rafael o Rubens— o a la sufrida princesa griega Andrómeda. Admirador de Lucian Freud y Francis Bacon, maestros en la representación sincera y bruta del cuerpo humano, para las obras el artista escoge como lienzo láminas anatómicas y las figuras se funden con músculos, esqueletos y órganos.