Ana Belén: "Estoy en forma para cuando llega la suerte"
Es madrileña y tiene 56 años. Lo que más feliz le hace es descansar en casa junto a su marido y sus hijos. "En casa se escucha desde Bola de Nieve hasta Bebe", asegura.
Ha llegado al Hotel de las Letras de Madrid a las 9.00 horas. La maquilladora le ha dado unos retoquillos. Hace un sol increíble y Ana Belén se asoma a la ventana. Nos recibe con una gran sonrisa y nos estrecha la mano apretando con fuerza. Está tranquila como la que lleva toda la vida haciendo eso. Habla segura, pausada y con mucha verdad.
¡Hace un día increíble!
Qué maravilla estar aquí con esta luz. Lo peor es cuando abres la ventana y el ruido te recuerda que estás en el centro de Madrid.
Hacía seis años que no sacaba disco.
Bueno... Hice Viva l’Italia, de versiones de grandes éxitos.
¿Dónde se ha metido durante este tiempo?
Han sido años muy productivos en los que no he dejado de hacer giras, teatro, cine...
Éste es un disco con temas hechos a medida para usted. Tiene letras de su hijo, de Bebe, de Joaquín Sabina, de Pablo Guerrero...
Ése es el mayor placer de todos. Me mandan muchísimas canciones, y yo voy viendo con cuáles puedo trabajar a gusto. Es como un juego muy divertido. Que mi hijo me componga y que lo haga tan bien es uno de los orgullos más grandes de mi vida.
Se sentirá afortunada...
Muchísimo, pero no ahora, sino siempre. La suerte me acompaña y yo he aprendido a estar en forma para cuando ella llega.
Es un trabajo sin prisas. ¿Siempre se ha podido tomar esos privilegios?
Antes nos los tomábamos porque la industria funcionaba con más reposo, y ahora me los tomo porque la edad no sólo nos sirve para hacernos viejos (risas).
Los internautas la eligen como una de las mujeres que mejor ha sabido crecer.
(Carcajada) Qué educado eres; habrán querido decir hacerme vieja. Pues eso es uno de los piropos más bonitos que me pueden decir, ¡eso es precioso!
¿Le preocupa hacerse mayor?
Me preocupa envejecer bien. Yo quiero ser una viejecita gustosa, con sus arrugas... Lo que es una vejez bonita, donde se note la experiencia y los años. ¡Qué maravilla!
¿Qué papel le ha costado más en su vida, el de madre, el de esposa, el de cantante...?
El papel que más me cuesta y me obsesiona es el de madre, porque nunca llegas a saber y a controlar la situación. Los hijos crecen muy rápido y hay que adaptarse constantemente.
Siendo Ana Belén y mujer de Víctor Manuel, ¿quiénes eran sus ídolos musicales?
(Risas) Yo tenía, como todos los de mi generación, a los Beatles.
¿Tanto éxito le tambaleó alguna vez su verdadero yo?
Jamás, porque nunca me lo permitieron. Soy muy tontona, pero mi familia, y luego mis hijos, nunca me consintieron la más mínima tontería. Me han educado muy bien (risas), aunque es fácil que se te vayan los pies del suelo.
¿Cuáles son las cosas que más le preocupan?
La falta de empatía que se fomenta. Ahí los medios de comunicación tienen mucha culpa. Hay mucho loco que incita y crispa a la ciudadanía. Vamos a tranquilizarnos, la gente no va asustada por la calle. La cosa no está tan mal.
¿Qué dice de la polémica sobre el tema que su marido dedicó a Franco en 1966?
Pues no tengo nada que decir, porque Víctor ya lo ha dicho todo. Además, esto dicen que pasó cuando él tenía 16 años y, aunque parezca sorprendente porque llevamos juntos casi toda nuestra vida, aún no éramos ni novios (risas).
¿Qué cosas no haría si volviese atrás?
Creo que volvería a hacerlo todo igual, y no porque no haya cometido fallos (risas).
Otros discos a la venta
Nick Cave da vida a Grinderman
El australiano Nick Cave vive momentos de hiperactividad. Tras un disco doble junto con sus inseparables Bad Seeds, ahora regresa con un nuevo proyecto: Grinderman (el hombre trituradora). En sus propias palabras, "el nombre resume el tipo de música que hacemos: trituramos".
Hoy también se publica Pocket Symphony (Mute), el nuevo disco del dúo francés Air. Han sido número uno en la tienda iTunes España y actuarán en el Summercase Festival en julio.
También cantan en francés, pero éstos son de Pamplona: el grupo Souvenir regresa con 64 (Jabalina), un álbum en el que funden melodías delicadas con arreglos electrónicos. Pat Metheny y Brad Meldhau colaboran de nuevo en Quartet (Nonesuch), y Francisco Céspedes edita Con el permiso de la bola. J. M. Marcos