La flota cefalopodera pide a Mar "hacer lobby" en Europa para forzar que se renegocie el acuerdo con Mauritania
Una delegación de marineros que faenaban pulpo en el caladero mauritano ha sido recibida este jueves por la conselleira de Medio Rural e do Mar, Rosa Quintana, a la que han pedido que la Xunta "haga lobby" en Europa para forzar que se renegocie el acuerdo pesquero que provocó su expulsión de aquellas aguas.
Encabezados por el responsable nacional de la CIG-Mar, Xabier Aboi, los pescadores han hecho hincapié durante la reunión en la relevancia de la votación que se realizará en la Eurocámara en septiembre, referida al nuevo Fondo Europeo Marítimo y de Pesca.
"Sería una patada en los morros a Damanaki", ha destacado el sindicalista en declaraciones a Europa Press al término de la entrevista con Quintana para visualizar la idea de que, en caso de recabar el apoyo necesario por parte del Parlamento Europeo, la comisaria de Pesca, a su juicio, se vería obligada a volver a negociar el protocolo con el Gobierno de Mauritania.
Los marineros han explicado a la conselleira la problemática del fin de las ayudas establecidas por el fin de la actividad después de "una larga parálisis" y, según Xabier Aboi, el encuentro ha sido "bastante tenso" por momentos.
Quintana, ha indicado Aboi, "defendía todo el trabajo que, según ella, hicieron Madrid y la Xunta". "Nosotros no queríamos entrar en eso porque, evidentemente, tenemos otra opinión", ha confrontado.
PROPUESTA
Así, lo que han planteado los tripulantes es que "a partir del 1 de septiembre hay que ir al Parlamento Europeo y hacer lobby con el mayor número de eurodiputados". "Ya que Madrid no lo va a hacer, que lo haga la Xunta", ha remarcado el responsable de CIG-Mar antes de precisar que su petición pretende la conformación de una delegación en la que se integren Administración autonómica, portavoces de los grupos parlamentarios en la Cámara gallega, representantes de armadores y de la propia flota.
Los marineros han trasladado esta demanda pero son conscientes de que, ahora, "la decisión es de ellos". "Creo que entendieron el tema", ha opinado Xabier Aboi, quien espera recibir noticias por parte de la consellería en el plazo de entre 10 y 15 días.
En lo que a ellos respecta, este mismo viernes se reunirán con la alcaldesa de Marín y tienen ya la vista puesta en la manifestación convocada para el día 30 de agosto en esta localidad, en cuyas proximidades reside un nutrido grupo de los pescadores afectados.