Steve Jobs: la historia del controvertido gurú de la tecnología llega a la gran pantalla

Ashton Kutcher caracterizado como Steve Jobs.

Visionario, tirano, brillante, mezquino, pasional, arrogante y, sobre todo, carismático. Tan querido como odiado, tan reverenciado como criticado. Así se recuerda a Steve Jobs, cofundador de Apple, celebrity de Silicon Valley, padre de la manzana que muchos mordieron, muerden y morderán asegurando que su sabor es dulce e insuperable mientras que otros la señalan como fruta envenenada. La realidad, como casi siempre, se queda en un término medio.

Lo que nadie pone en duda, ni fanáticos ni detractores, es que Jobs es una de las grandes figuras de finales del siglo XX y principios del XXI, un personaje icónico del progreso tecnológico cuya imagen alcanzó el rango de mito tras su fallecimiento en 2011 con tan sólo 56 años, tras una larga lucha contra un cáncer de páncreas que fue mermando su salud desde 2004.

Steve Jobs desapareció y dejó tras de sí un halo de fascinación que hoy muchos recogen y transmiten a través de imágenes y palabras. Su vida o parte de ella ya ha sido plasmada en dos biografías, varios cómics, una obra de teatro y dos películas, y se está preparando una tercera.

Este mismo 20 de septiembre llega a los cines uno de esos homeneajes póstumos, la película Jobs, dirigida por Joshua Michael Stern y protagonizada por Ashton Kutcher. El biopic, de corte independiente, narra la vida del directivo de Apple desde 1971 hasta el año 2000, es decir, la fundación de la empresa junto a su compañero Steve Wozniak, la creación del ordenador Apple I, su salto al éxito y su posterior caída con la llegada del nuevo milenio, poco antes de su nueva etapa de triunfo a raíz del iPod y iTunes.

Kutcher visionó horas de vídeos del fundador de Apple para meterse en el papel y poder interpretarlo de la mejor forma posible. Llegó incluso a someterse a una estricta dieta basada en la ingesta de frutas y frutos secos —la misma que en su día siguió Steve Jobs— que hizo que el actor acabase enfermando pocas semanas antes de empezar el rodaje.

Esta obsesión de Jobs por los regímenes exigentes y los tratamientos naturales estuvo presente en su vida hasta poco antes de su muerte, cuando optó por la medicina alternativa frente a la tradicional para luchar contra la grave enfermedad que padecía. Steve Jobs, desoyendo los consejos de su familia, rechazó durante nueve meses una operación contra el cáncer de páncreas que le podría haber salvado la vida.

No era esta, ni mucho menos, su única rareza. Siempre se ha hablado mucho sobre su agitada juventud: su viaje a la India, el consumo de LSD, su forma de vestir desaliñada e incluso sus problemas de higiene. Y se ha criticado a menudo su poca solidaridad. A diferencia de su rival y amigo Bill Gates, reconvertido a filántropo, Jobs siempre se mostró reacio a colaborar con causas benéficas. Algo que ha cambiado en Apple desde que Tim Cook asumió el liderazgo de la compañía.

Una personalidad complicada

Aunque los aspectos más polémicos de su vida siempre han estado vinculados a las relaciones laborales y el trato con sus allegados. Todo el mundo alababa a Steve Jobs por su ambición y sus aptitudes profesionales, pero nadie estaba a gusto trabajando a su lado. De carácter reservado, Jobs era famoso por su soberbia (se enfadó por no ser el empleado número 1 de la compañía y le acabaron otorgando el 0 para contentarle), su mal genio, el trato tiránico que le daba a sus empleados y sus comportamientos maleducados y caprichosos (era conocida, por ejemplo, su costumbre de aparcar donde le apetecía, sin respetar normas ni señalizaciones).

"Su mayor defecto era que en ocasiones se dejaba llevar tanto por la pasión que podía llegar a ser mezquino con las personas. (...) No solía pedir perdón, pero aun así la gente le era muy fiel porque valoraba su pasión y su talento", asegura su biógrafo oficial, Walter Isaacson.

Jobs no es la primera película ni será la última basada en la vida del gurú de Apple. En 1999 se estrenó Piratas de Silicon Valley, una cinta que relata el inicio del negocio de los ordenadores personales desde el punto de vista de la rivalidad de Steve Jobs y Bill Gates.

Por otro lado, el guionista Aaron Sorkin (Algunos hombres buenos, La red social, The Newsroom) prepara ya un texto para otro largometraje sobre Steve Jobs, a cargo de Sony Pictures, que estará basado en la biogafía autorizada escrita por Isaacson y que cuenta con Wozniak como asesor. Aunque no se concen demasiados detalles sobre esta producción, Sorkin adelantó que el guión se centrará en tres bloques de 30 minutos en tiempo real que reflejarán los instantes previos a tres importantes presentaciones de productos de Apple.

Al margen de las producciones audiovisuales, además de la obra de Isaacson —que vio la luz pocas semanas después del fallecimiento de Jobs—, se publicó una segunda biografía, Steve Jobs: el hombre que pensaba diferente, dirigida a los jóvenes y basada en el célebre discurso que el padre del iPhone dio en la Universidad de Stanford alentando a todos aquellos "que no quieran renunciar a sus sueños".

Más polémica es la obra teatral Agonía y éxtasis de Steve Jobs, una obra de Mike Daisey —el Michael Moore del teatro— en la que se critica muy duramente al cofundador de Apple, a quien llega a definirse como "un gilipollas con delirios de grandeza". La representación es un monólogo en el que se repasa la vida de Jobs al mismo tiempo que se relata un viaje a las fábricas chinas de Foxconn, donde trabajadores en duras condiciones laborales (es conocido el alto índice de suicidios entre los trabajadores de esta empresa) sacan adelante los productos de Apple.

La vida de Jobs también ha quedado reflejada en un cómic y en un manga e incluso se han popularizado los muñecos con su aspecto.

A Wozniak no le gustó 'Jobs'

La película fue estrenada en el pasado festival de Sundance, donde tuvo una cálida acogida. Sin embargo, el propio Wozniak no dio su visto bueno al filme, del que asegura que está "totalmente equivocado". El cofundador de Apple señala que, en muchos momentos, la película muestra los roles de Jobs y el suyo propio intercambiados. Declaró estar "avergonzado" por cómo se ha retratado su relación con Steve Jobs en el largometraje pese a la ayuda que ha estado ofreciendo tanto al equipo como al guión para que se retratara con fidelidad los hechos ocurridos, llegando a permitirles el acceso al mismo garaje en el cual se comenzaron a diseñar sus primeros ordenadores.

Sus grandes éxitos

En su juventud, Steve Jobs hizo algo más que tontear con las drogas. Era descuidado en su forma de vestir e incluso con su higiene. Además, se mostraba frío y distante con la mayoría de la gente e injusto y déspota con no pocos, defectos que le acompañaron toda su vida. Sin embargo, su talento le garantizó numerosos triunfos y un gran hueco en la historia:

En 1976, fundó Apple junto a Steve Wozniak, allí impulsó la comercialización del ordenador Apple I y estableció el estándar de los ordenadores personales con el Apple II.
En 1984, simplificó aún más la informática con Macintosh, el primer ordenador personal con interfaz gráfica de usuario y ratón.
En 1986, compró la empresa The Graphics Group, la que a día de hoy se conoce como Pixar.
En 1996, ligó la marca Apple a la idea de buen diseño y modernidad con el iMac.
En 2001, señaló un nuevo camino a la industria de la música con el lanzamiento del iPod.
En 2003, iTunes completaba la idea propuesta por el iPod y revelaba el potencial de la distribución digital.
En 2007, Steve Jobs marcó un punto de inflexión en la industria de la telefonía móvil con el iPhone.
En 2010, el alma de Apple lideraba su último gran triunfo, la creación del negocio de las tabletas gracias al lanzamiento del iPad.

Steve Jobs, desde los ojos de aquellos que le conocieron

Barack Obama, presidente de Estados Unidos: "Steve Jobs fue lo suficientemente valiente para pensar de modo diferente, lo suficientemente osado para creer que podría cambiar el mundo y con el talento necesario para conseguirlo"
Walter Isaacson, su biógrafo autorizado: "Su mayor defecto era que en ocasiones se dejaba llevar tanto por la pasión que podía llegar a ser mezquino con las personas. (...) No solía pedir perdón, pero aun así la gente le era muy fiel porque valoraba su pasión y su talento"
Walter Isaacson, su biógrafo autorizado: "Le pesaba la forma en la que afrontó el nacimiento de su primera hija, el no haberse hecho cargo de ella desde un primer momento. Y de pequeñas cosas, como de la manera en la que trató a sus padres cuando fue a la universidad. Creo, también, que se arrepintió de no haberse operado del cáncer nada más le fue diagnosticado"
Tim Cook, director ejecutivo de Apple: "Uno de los mayores regalos que Steve dio al mundo fue Apple. Ninguna otra compañía fue creada con tanta creatividad o con tanta calidad como la suya. Los valores originales de Steve y su espíritu estarán para siempre en Apple. Compartimos el gran privilegio y la gran responsabilidad de llevar este legado hacia el futuro"
Bill Gates, cofundador de Microsoft: "El mundo raramente ve a alguien que produzca un impacto tan profundo como el que Steve ha tenido. Sus efectos se sentirán durante varias generaciones"
Steve Wozniak, cofundador de Apple: "Steve fue claramente el cerebro empresarial más excepcional de su época"
Steve Wozniak, cofundador de Apple: "Tenía una mente muy rápida y casi siempre que discutíamos sobre qué deberíamos hacer en la compañía él estaba en lo cierto (...) Era inteligente, sosegado y con sentido común"
Richard Stallman, fundador del movimiento por el software libre: "Como el alcalde de Chicago Harold Washington dijo de su corrupto predecesor el alcalde Daley, "no estoy contento de que haya muerto, pero sí de que se haya ido". Nadie merece tener que morir (ni Jobs, ni el Sr. Bill, ni incluso gente culpable de males peores que los de ellos). Pero todos nosotros sí merecemos el final de la maligna influencia de Jobs sobre la informática de la gente. Por desgracia esa influencia continúa a pesar de su ausencia. Sólo podemos confiar en que sus sucesores sean menos eficaces que él al intentar continuar con su legado"
Chrisann Brennan, primera novia de Steve Jobs y madre de su primera hija: "Se quedaba despierto hasta tarde para escribir poemas en su máquina de escribir o, a menudo, para reescribir las canciones de Bob Dylan. Era un solitario, no hablaba mucho y creo que utilizaba las canciones de Dylan para que el mundo tuviera sentido"
John Lasseter, director creativo y ejecutivo de los estudios Pixar y Walt Disney: "Steve nos dio una oportunidad y creyó en nuestro sueño descabellado de hacer películas animadas con ordenador; lo único que siempre nos dijo fue 'hacedlo genial'. Él es la razón por la que Pixar prosperó y su fuerza, integridad y amor por la vida nos hizo mejores personas"
Escritor y extrabajador de Apple: "Gritaba, lloraba, pataleaba. Tenía una cruel facilidad para llevar a sus empleados al borde de un ataque de nervios y luego cargárselos; pocos quisieron trabajar con él dos veces"
John Perry Barlow, cofundador de la Electronic Frontier Foundation: "Steve era una persona superficial y narcisista que se desarrolló emocionalmente con el paso del tiempo. Creó cantidad de gran hardware, pero a lo largo de los años también se inventó a sí mismo"
Dick Costolo, director ejecutivo de Twitter: "Una vez cada mucho tiempo alguien llega y no solo aumenta las expectativas, cambia completamente los criterios"
Martin Varsavsky, fundador y director ejecutivo de FON: "Steve Jobs parece ser la persona más exitosa pero la menos feliz de Silicon Valley"
Mark Zuckerberg, fundador de Facebook: "Steve, gracias por ser un mentor y un amigo. Gracias por enseñarnos que lo que se genera puede cambiar el mundo. Te echaré de menos"

Gurús de la tecnología e Internet en la gran pantalla

Entre las muchas personalidades que han adquirido notoriedad dentro del mundo de la tecnología e Internet, Steve Jobs era sin duda el más mediático y, por tanto, el que más obras audiovisuales ha inspirado, pero no el único. En Jobs puede verse al cofundador de Apple, Steve Wozniak, y en Piratas de Silicon Valley también hay hueco para su colega y rival Bill Gates. Aunque el caso más significativo es el de Mark Zuckerberg, fundador de Facebook y figura central de la película de David Fincher La red social, un largometraje en el que Justin Timberlake interpreta a Sean Parker, cofundador del polémico Napster.

En 2008, se anunció que Leonardo DiCaprio iba a meterse en la piel de Nolan Bushnell, fundador de Atari y uno de los pioneros de la industria del videojuego, pero el proyecto no ha acabado por salir adelante. El filme que sí verá la luz será The fifth estate, en el que Benedict Cumberbatch se convertirá en el australiano Julian Assange, fundador de la plataforma de filtraciones Wikileaks. También Kim Dotcom, creador de Megaupload, verá su historia llevada al cine. Será en el documental Mega Conspiracy, que aún se encuentra en desarrollo.