Toca sufrir la renovación de las tuberías de agua
Las obras
Con zanjas: Las máquinas excavarán la zanja completa de 1.500 metros en las calles Iparraguirre, Alameda de Rekalde, Gordoniz y Camino Landeta, en Zurbarán. Otros 2,6 km se cambiarán en todos los distritos, a partes iguales. Se aprovechará para urbanizar las aceras y la calzada. Son las obras más molestas porque se interrumpe el paso al peatón en el tramo a modificar.
Con pozo de ataque: En Alameda de Urkijo, Alameda de Rekalde, María Díaz de Haro, entre otras muchas calles de Abando e Indautxu, se podrá cambiar las tuberías sin apenas obras.
Con todo ello, Bilbao habrá renovado el 6% de la red más antigua. La ciudad cuenta con 86 km de tuberías de más de 75 años. Es el 14% del total de 600 km de la red de aguas de saneamiento. «Esas tuberías, por suerte, son de gres, un material muy duro», explica Noelia Izquierdo, responsable de Saneamiento.
Las obras para cambiar la red más antigua durarán, aún, otros siete años, según las previsiones de los responsables de Obras y Servicios.
Tras esta modificación, le llegará el turno a las tuberías que tienen entre 50 y 75 años. Son 375 km, el 62,5% del total de tuberías. De menos de 50 años hay otros 86 km.
Si hay subvención, aún más obras
La renovación de la red de saneamiento depende del presupuesto. El Ayuntamiento espera la concesión de más ayudas económicas del Gobierno vasco, Diputación o Unión Europea para poder cambiar más tuberías. La intención pasa por cambiar en 2007 casi 20 km.
600 kilómetros tiene la red de saneamiento de la capital.