Internacional

"Temí por mi vida desde el primer hasta el último momento"

Concepción Marlaska y Ángel Sánchez, los dos turistas españoles que fueron secuestrados en Colombia, han llegado este lunes al Aeropuerto de Madrid-Barajas, donde fueron recibidos por el secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, y donde han podido abrazarse con sus familiares y ofrecer una nueva rueda de prensa.

"Temí por mi vida desde el primer hasta el último momento", ha dicho Sánchez nada más empezar, recalcando que era una impresión "personal". Ha relatado que cuando la banda les atracó él recibió un golpe en la cabeza con un revólver, "Menos mal que no me rompieron el cráneo, fue más aparatoso que otra cosa, me han hecho un tac y está perfecto", ha añadido.

La pareja ha manifestado, entre otras cosas, no saber cómo fue exactamente su liberación. "No sabemos si nos trasladaban para otra casa o nos trasladaban para liberarnos, pensamos que podría ser un traslado más", ha explicado Sánchez. Tampoco saben de qué manera sus familiares enviaban preguntas para que los secuestradores les hicieran "fes de vida" y así poder saber que estaban vivos, "nos tienen que contar muchas cosas", han dicho.

"El pánico", ha dicho Sánchez, no desapareció inmediatamente tras su liberación, "la seguridad cien por cien no la notas hasta que estás en casa del embajador", ha asegurado. Ambos han confesado que tras ser liberados se repetían varias veces que no se lo creerían hasta que estuvieran montados "en el avión".

Uno de los momentos más duros de la rueda de prensa, que se ha desarrollado en un tono muy distendido, ha sido cuando Sánchez ha explicado que "el primer día fue el más doloroso" porque siempre tuvo "el sueño, el deseo de poder escapar"; cuando le "ataron las manos con bridas" y le vendaron los ojos, ha añadido, "en ese momento dejé de ser una persona".

Hubo un momento en el que les ordenaron ponerse de rodillas y pensaron que les iban "a pegar un tiro en la cabeza". Sánchez ha relatado que los dos se pusieron a rezar en voz alta y "a despedirse" entre lágrimas. "Más escueto", le ha espetado ella en voz baja ante los medios.

Marlaska, por su parte, ha dicho que ellos creen que su secuestro "fue simplemente un atraco" y que el hecho de que ella sea pariente de juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska ha sido "casualidad". La pareja ha calificado de "inhumano" el comportamiento de los secuestradores y han asegurado que "cien por cien" volverán a Colombia en el futuro.

Por último, han agradecido a las policías colombiana y española sus esfuerzos para liberarlos "vivos" y han resaltado la importancia de la colaboración entre los Gobiernos de ambos países para la resolución del secuestro.

Marlaska y Sánchez han sido recibidos por el 'número dos' de Interior y el responsable de la Policía Judicial del Cuerpo Nacional de Policía, el comisario Losada, a los que han mostrado su agradecimiento.

Ella, con pantalón y chaqueta morada, y él, con la camiseta de la Selección Española de Fútbol, se besaron ante las cámaras antes de la rueda de prensa y se mostraron sonrientes en todo momento. "Aún no estamos casados", bromeó Sánchez, después de que los periodistas pidiesen otro beso a la pareja.

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