A Coruña

Quintana asegura que "no ha tirado la toalla" y promete trabajo hasta el final para mejorar la ley alimentaria

Rosa Quintana
EUROPA PRESS

Apuesta por una reforma de la política pesquera "valiente" y considera "bueno" que se haya "flexibilizado" el fin de los descartes

Espera que la crisis de Pescanova se resuelva "lo más rápido posible" pero confiesa que le dolieron las críticas de Paz Andrade

La conselleira de Medio Rural e do Mar, Rosa Quintana, asegura que la Xunta "no ha tirado la toalla" y apela al trámite parlamentario y a seguir trabajando "hasta el final" en relación con la ley de cadena alimentaria, con el objetivo de "mejorar" el cuerpo del texto mediante la incorporación de una enmienda pactada con el sector lácteo en Galicia, que pretende fijar la definición de unos costes medios de producción para evitar que el precio de la leche en origen sea inferior a los mismos.

Con todo, en una entrevista concedida a Europa Press, la conselleira resalta que la exposición de motivos de la norma "ya recoge la filosofía del legislador" y "tal y como está ya le da mucha fuerza al sector primario", al permitir a los ganaderos constituirse en organizaciones de productores para negociar con la industria lechera.

"Yo no asumo el fracaso. La ley está en trámite en las Cortes y veremos cómo sale", advierte, antes de aludir a la posibilidad de incorporar algún cambio en disposiciones transitorias o adicionales. "Seguimos trabajando. La semana pasada nos reunimos con el presidente del Tribunal Galego da Competencia para ver qué otras cosas podíamos argumentar y vamos a seguir haciéndolo hasta el momento final", subraya Quintana.

Pese a todo, y a la vista del reciente informe de la Comisión Nacional de la Competencia, avanza que no va "a llevar al sector a un camino donde pueda incurrir en una sanción". "Intentaré que la ley recoja todo aquello que favorezca a los sectores primarios, al lácteo fundamentalmente, pero lo que no haré es meterlo en un lío del que luego no pueda ayudarle a salir", llama la atención.

Así, lanza un mensaje a los sindicatos agrarios, a los que pide "pensar más en el sector y menos en armas políticas". "Tenemos que tener todos un poquito de sensatez", asevera antes de afirmar que "a la gente enseguida le gusta montar follón". "Yo soy de otra manera. Ante los problemas, los hay que salen a la calle a pegar cuatro gritos y los hay que buscamos trabajar y argumentar jurídicamente todo lo que podamos", destaca.

"sector atomizado"

A su juicio, es "tan necesaria" esta ley porque Galicia tiene "un sector profundamente atomizado que no es capaz de hacer fuerza frente a la industria o la distribución". "Si no tuviéramos ese problema, si el sector estuviera bien organizado, si tuviera una buena base territorial y unas explotaciones más eficientes, a lo mejor ya no necesitaríamos tanto lo que hoy consideramos imprescindible", sentencia para abogar por un análisis con perspectiva y no "miradas cortoplacistas".

A esta visión atribuye, precisamente, los trabajos para elaborar una ley de mejora de la estructura de la propiedad agraria, con la finalidad de paliar un "déficit muy fuerte" que tiene la comunidad. "La administración tiene que poner todas las herramientas para conseguir tener un sector fuerte", reflexiona la conselleira.

UN 5%

De descartes,

"mejor que nada"

Ya en el ámbito pesquero, la responsable gallega opina que el límite de un 5% de descartes acordado en el Consejo de Ministros de esta semana en las negociaciones sobre la reforma de la Política Pesquera Común (PPC) es "mejor que nada" y valora que "es bueno que se haya flexibilizado" el objetivo de acabar con los descartes.

Galicia, llama la atención, quiere "descartes cero", porque sabe "muy bien buscar aplicaciones de consumo a las especies que van apareciendo", pero "el gran problema" en este campo es "la escasez" de cuotas de capturas derivada del "mal llamado principio e estabilidad relativa".

"Hemos hecho un esfuerzo inmenso a la hora de desguazar flota y ese esfuerzo debe verse compensado para que la flota que queda viva tenga capacidad suficiente para realizar una actividad pesquera que le permita seguir manteniendo una actividad económica", proclama.

Así las cosas, aboga por "ir haciendo un estudio" de las pesquerías multiespecíficas —con varias especies— para "tener siempre una posibilidad de descartar" aquellas que forman parte del conocido como 'bycatch' —pesca no intencionada—.

Para Rosa Quintana, el ministro español del ramo, Miguel Arias Cañete, "ha conseguido trasladar que España no puede ser perjudicada en la aplicación de esta nueva forma", por lo que incide en que "es necesario que se vayan adaptando las cuotas disponibles a la capacidad real de la flota".

Todavía está pendiente la negociación con la Eurocámara y la dirigente autonómica reconoce que el proceso "está siendo duro", pero espera "que se tome la decisión de hacer una reforma valiente". Hay que pensar, según remarca, que se está diseñando "la gestión de la actividad pesquera para siete años".

"mejor" visión de la ce

Ahora, "la visión" que la Comisión Europea tiene sobre el sector pesquero español y gallego es "mejor", a su juicio, porque se están haciendo "controles" y gestionando "muy bien" los topes atribuidos a cada embarcación. A este respecto, cree que la Comunidad gallega ha hecho "muchas cosas" en los últimos tiempos que responden a una explotación sostenible pero "no ha sido capaz de trasladarlo a la sociedad".

En este sentido, llama "a creer un poquito en lo nuestro" y, en referencia a la reciente polémica con el mejillón y Francia, lamenta que en cuanto saltó la noticia el sector puso "en duda" si existiría un fallo en el sistema de control gallego. "Yo, como estoy convencida, salgo y doy la cara", confronta, tras indicar que los medios de comunicación franceses no dieron repercusión a la alerta sanitaria porque "con lo chauvinistas que son, desde el primer momento dirían que todo está correcto".

Pide "sensatez" por el plan del pulpo

Después de la expulsión de los buques cefalopoderos de Mauritania, que aún aspiran a volver a aquel caladero, estos días son los barcos de la ría de Arousa los que protestan por el plan de gestión del pulpo aprobado por la Xunta, que establece que las nasas tendrán que levantarse de su calado todos los días con la excepción de aquellas que están en fondos superiores a los 25 metros, que podrán permanecer de lunes a viernes sin ser llevadas a puerto.

Quintana les pide que sean "sensatos", porque, según subraya, está "mirando por su futuro" y es "la obligación" que tiene como gobernante. "Este tema ya lo hablé el año pasado con el patrón mayor de Ribeira, con el de Aguiño y con el de Palmeira y me dijeron: 'conselleira, denos este año, ya verá como en octubre el pulpo se recupera y, si no es así, tome la medida que tenga que tomar'. Vimos lo que pasó, no se recuperó y este año tengo que tomar la medida que tengo que tomar", afirma.

"cada uno es libre para opinar"

Por otra parte, acerca de la crisis de Pescanova, insiste en que le gustaría que "esto se resuelva lo más rápido posible", puesto que es una empresa "muy importante para Galicia" y ve "necesario que siga siendo gallega" y el mantenimiento de los puestos de trabajo. Así, celebra el crédito acordado esta semana, que permitió que la firma "siguiera operando con normalidad".

Sobre las críticas vertidas hacia su persona en la revista de Paz Andrade —accionista de Pescanova—, confiesa que le dolieron. "Me duele que duden de mi capacidad lectora y creo que he demostrado una capacidad intelectual porque no he llegado a doctora sin saber leer ni escribir", señala y agrega que "desde el minuto uno" demandó que la situación se resolviese "lo más rápido posible" y "pedir mucho más", en su opinión, "no viene a cuento". "Luego cada uno es muy libre para opinar", concluye.