Joaquin Phoenix y David Letterman, compañeros en el crimen

A estas alturas, ya nadie se cree que la desintegración personal de Joaquin Phoenix en su película I'm Still Here fuese auténtica. Y ese "nadie" incluye a Casey Affleck, director del filme, quien desveló el pasado miércoles (ya era hora...) que la polémica película era un falso documental, concebido para desvelar algunos aspectos turbios de la maquinaria hollywoodiense. Pero lo que nadie se imaginaba aún es que la entrevista de Phoenix con el famoso presentador de talk shows David Letterman, punto de arranque de toda la historia, también formase parte del plan...

Recordemos que, en febrero de 2009, un Phoenix barbudo, desaliñado y (aparentemente) intoxicado compareció ante Letterman, anunciando que Hollywood estaba muerto para él y que quería convertirse en rapero. Pues bien: tanto el actor como el presentador estaban en el ajo, como ha reconocido Bill Scheft, uno de los guionistas del programa.

"David estaba al tanto, y le encantaba, porque eso le permitiría improvisar siguiéndole el juego [a Phoenix]", afirma Scheft. Y prosigue: "Hay gente que aún no se lo cree, y que insiste en que Phoenix es esquizofrénico y va a acabar como su hermano [River, fallecido en 1993 por sobredosis]. Pero yo vi las notas de producción, y al hermano de Ben Affleck [es decir, Casey Affleck] grabándolo todo desde el backstage".

Así que toda la entrevista (e, involuntariamente, su posterior repercusión mediática) fueron parte del bromazo. Vale, muy bien, pero ¿a qué viene ahora esta oportuna confesión? Pues a que, como recordaréis, Phoenix ha anunciado que volverá al programa de Letterman el próximo miércoles 22 de septiembre. Seguiremos informando...