CC.OO. Aragón reclama políticas de control de precios que favorezcan la recuperación económica
CC.OO. Aragón ha calificado de "muy negativo" el aumento del 0,7 por ciento del IPC en agosto respecto al mes anterior, con una tasa de variación interanual que sube hasta el 2,5 por ciento, dos décimas menos que la registrada en España, por lo que ha reclamado políticas de control de precios que favorezcan la recuperación económica.
Desde CC.OO. Aragón han recordado que esta tasa representa niveles que no se registraban desde noviembre del año pasado para apuntar que supone el encarecimiento de la cesta de la compra y hace que muchas familias tengan serias dificultades para cubrir sus necesidades básicas.
También es negativo para la economía aragonesa "al empeorar la competitividad de nuestros productos en el exterior y perjudicar nuestras exportaciones, único motor de crecimiento de la economía de nuestro país en estos momentos y que ya se ha visto perjudicado por la recesión que afecta también a nuestros principales socios comerciales europeos", han destacado desde CC.OO. Aragón en un comunicado.
Esta situación, ha añadido el sindicado, viene agravada con la importante repercusión negativa que esta teniendo en los salarios pactados en los convenios colectivos, ya que "en muchos de ellos no hay cláusulas de revisión salarial y esta nueva subida de precios supone una reducción adicional que no será compensada".
CC.OO. Aragón sigue reclamando la inclusión de estas cláusulas que "son muy importantes para evitar los efectos indeseados" del IPC y repercute negativamente en el consumo interno del país.
Tras esta exposición han incidido en que "ante esta nueva amenaza de escalada de la inflación se hace indispensable un esfuerzo por parte de los empresarios para que controlen la evolución de los precios y por parte del Gobierno para que controle la subida energética que lastra el consumo interno, empeora nuestra competitividad y dificulta la recuperación económica".
En los próximos meses, la subida del IVA que se aplica desde el 1 de septiembre, augura un alza de los precios "mucho mayor que la acontecida en agosto" y avanzan que "sus consecuencias serán la caída en el consumo, la perdida del poder adquisitivo de los trabajadores en aquellos convenios sin cláusula de revisión y el empeoramiento en la competitividad de las empresas".