Los pediatras de EE UU se posicionan a favor de la circuncisión en recién nacidos

La evidencia científica demuestra que los beneficios para la salud de aplicar la circuncisión en recién nacidos supera los riesgos, según un estudio publicado este miércoles por la Academia Americana de Pediatría (AAP).En Estados Unidos, un país con una tradición notablemente arraigada sobre la circuncisión, es la primera vez que los expertos en salud infantil dan un informe positivo acerca de esta práctica, tras años de neutralidad al respecto.El nuevo informe sustituye a uno del año 1999, del que se diferencia por su posicionamiento a favor de este método al constatar los beneficios que supone para los hombres."No obstante, estos beneficios no son lo suficientemente extraordinarios como para recomendar la circuncisión de rutina en todos los varones recién nacidos", puntualiza el comunicado, que afirma que la decisión debe recaer libremente en los padres.Andrew Freedman, del Hospital Cedars-Sinaí Medical Center de Los Ángeles (EEUU) ha coordinado el trabajo, que reunía a un grupo multidispilinar de expertos para evaluar científicamente los riesgos y los beneficios de la circuncisión, y que se compone de más de mil estudios.Entre las ventajas halladas, el informe resalta que reduce los riesgos de infecciones urinarias, de cáncer de pene y de enfermedades de transmisión sexual, como el VIH y el virus del papiloma humano, que puede derivar en cáncer de cervix.En cuanto a los posibles inconvenientes, los expertos aseguran que no parece afectar de forma adversa a la función o sensibilidad del pene o la satisfacción sexual.El estudio también dice que el procedimiento implica riesgos poco comunes como “sangrado e inflamación”.“Aunque la evidencia también es clara en que los bebés experimentan dolor, hay varias formas seguras y efectivas de reducirlo. Si el bebé nace prematuramente, tiene una enfermedad al nacer, o tiene defectos congénitos o problemas en la sangre, no debe ser circuncidado inmediatamente”, publica la APP.

Una práctica médica ampliamente aceptada

La circuncisión, que consiste que consiste en el corte del prepucio del pene, es una costumbre religiosa común entre los judíos y musulmanes y es una práctica médica ampliamente aceptada. Pero los críticos del procedimiento dicen que no es médicamente necesario y conlleva el riesgo de complicaciones y dolor.Los niveles de circuncisión de los recién nacidos en EEUU son altos en comparación al uso de esta práctica en Europa, según un estudio de la Universidad John Hopkins, difundido la semana pasada. Así, el 55% de los dos millones de niños varones que nacen anualmente en EEUU son circuncidados, mientras que en Europa sólo se aplica a uno de cada diez bebés.Pese a ello, esta práctica se ha reducido entre los estadounidenses, ya que en las décadas de los setenta y ochenta sólo dos de cada diez niños no pasaba por esta operación.Aunque dos ciudades californianas (San Francisco y Santa Mónica) intentaron sin éxito prohibir a nivel municipal la circuncisión en 2011, lo cierto es que EEUU es uno de los países donde más se aplica, junto con estados como Israel, Canadá, Nueva Zelanda, Australia, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).A nivel internacional, esta práctica volvió al debate público en las últimas semanas tras una sentencia judicial en Alemania que lo calificaba de "lesión corporal".El fallo judicial llevó al Parlamento germano a aprobar hace un mes, por amplia mayoría, una resolución defendiendo la legitimidad de la circuncisión en menores de edad, como exponente del respecto a la libertad de religión.