Bendodo asegura que su nombramiento en la FEMP es un "respaldo" a la gestión del PP de Málaga
El máximo responsable de la Diputación de Málaga, Elías Bendodo, ha asegurado este sábado que su nombramiento como presidente de la Comisión de Juventud y Deportes de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) es "un respaldo a la gestión de todo el Partido Popular de Málaga".
"Yo lo interpreto como un apoyo a todos los que estamos aquí, al Partido Popular de Málaga, al resultado de las últimas elecciones municipales, donde sacamos un resultado espectacular", ha manifestado Bendodo a los periodistas.
Del mismo modo, ha incidido en que este respaldo "se materializa en esta federación que es la que representa los intereses de los municipios, ayuntamientos y diputaciones, y en la que la voz de Málaga se va a llevar para hablar fundamentalmente de deporte, juventud y de ocio. Esa es la responsabilidad que nos han asignado".
En este sentido, Bendodo ha incidido en que las políticas de juventud van a constituir "el gran reto". "Un 43 por ciento de jóvenes que hay en la provincia de Málaga quieren trabajar y no pueden", ha lamentado, precisando que, por tanto, un plan de empelo juvenil, en colaboración con el Instituto de Juventud, "debe ser la prioridad absoluta de esta comisión en lo que se refiere a juventud".
En cuanto a las política deportivas, el también presidente de los 'populares' malagueños ha señalado que va a llevar a cabo el modelo aplicado estos años en Málaga, el cual se basa en tres ejes "fundamentales".
En concreto, se trabajará en el apoyo "decidido" al deporte base y a que el país sea "un referente" en infraestructuras deportivas, en convenios de colaboración entre Gobierno, ayuntamientos y comunidades autónomas; y en potenciar acontecimientos deportivos de carácter nacional e internacional, que "sirvan como una gran atracción turística", ha apuntado.
Cerca de 100 representantes de las 7.331 entidades locales asociadas a la Federación Española de Municipios y Provincias participan este sábado en la décima Asamblea General para renovar los órganos de dirección y aprobar las líneas de trabajo de la institución para los próximos cuatro años. Además, por acuerdo de PSOE y PP, se reformarán los estatutos de esta organización para reducir su tamaño e impulsar su papel como interlocutor ante el Estado.