Los vigueses ya firman hipotecas a 50 años para comprar un piso
El objetivo de esta prolongación de la hipoteca es lograr que la cuota mensual no sea desorbitada, y se parezca lo más posible a una mensualidad de alquiler.
El auge de los estudios
Al tiempo que la hipoteca suma años, los compradores reducen sus aspiraciones en lo que se refiere a superficie. Desean un piso con 2 o 3 habitaciones, pero, en Vigo, sólo pueden aspirar a un apartamento. Entre los solteros solventes y los separados o divorciados la tendencia es tirar hacia el minipiso.
No son los únicos que apuestan por el piso pequeño y flexible: también las familias con hijos independizados . «Los constructores lo saben, y están haciendo muchos estudios», dice Carrera.
Si piensas en comprar
Cangas: Los precios se han disparado en los últimos años y pronto dejará de ser rentable comprar allí, afirman los asesores, pero ahora aún se puede conseguir un piso nuevo de dos dormitorios con garaje y trastero por 150.000 euros, frente a los 190.000 que costaría en Vigo.
A Cañiza, O Porriño, Salvaterra...: Quienes busquen una vivienda amplia y nueva por menos dinero, deberán estar dispuestos a desplazarse 20 minutos en coche hasta uno de estos municipios del área metropolitana. Chapela y Redondela están ya demasiado cerca para ser baratas.
Cuotas progresivas: Frente a las cuotas lineales, en las que la cantidad mensual varía poco, éstas permiten pagar menos al principio y más con el paso de los años, al confiar en que nuestras condiciones económicas mejorarán.
Refinanciación: Cada vez son más los hipotecados que renegocian su hipoteca para asumir un nuevo préstamo o aliviar la economía familiar con mensualidades menores.