Premios Mudito 2018: Los figurantes también tienen sus Oscar (¿o eran sus Goya?)

Cuando el show business decide darse premios a sí mismo, generalmente es como una excusa para repartir parabienes, lucir ropa guay y posar en la alfombra roja. Y para darle un empujón a su presencia en los medios, también. Pero ¿qué ocurre cuando unos profesionales considerados como los últimos monos del negocio del cine deciden repartirse estatuillas? Pues que tenemos entre manos los Premios Mudito, el certamen organizado por el grupo Figurantes de Madrid que reparte trofeos todos los años entre los extras del cine español, y cuya edición 2018 se celebra este sábado a las 17.00 en la Fundación Anselmo Lorenzo (Peñuelas, 41) de Madrid.

Bautizados en honor al personaje menos locuaz de Blancanieves y los siete enanitos ("porque los figurantes siempre hablan haciendo mímica, sin emitir ningún sonido") y luciendo este año un cartel presidido por Harpo Marx, otro ilustre silencioso, los Mudito no han nacido ayer, que digamos: esta es la cuarta vez que se celebran. Por la 'anti-alfombra roja' desfilaran unos 170 invitados a la gala y entre sus 11 categorías, aparte de las habituales (hay especialidades para cine, TV y publicidad, así como apartados para los mayores de 30 años) encontraremos otras que nunca veremos en otros premios más 'formales', como "Mayor tiempo en plano". Y esta edición de los premios añade un plus de emoción e intriga, puesto que se promete la aparición en la gala de "un actor muy conocido" para entregar uno de los premios honoríficos.

Ojo, eso sí, porque la intención de los Premios Mudito no es sólo dar un espaldarazo a un sector olvidado por la industria. Se trata también de llamar la atención sobre las condiciones laborales de los figurantes, que sólo disfrutan de un convenio colectivo desde hace dos años y suelen enfrentarse a una realidad de salarios ínfimos, despidos improcedentes y jornadas maratonianas cuyas horas extras no se reconocían hasta anteayer, como quien dice. Algo más grave tratándose de un sector que proporciona un dinero extra a muchos parados y gente afectada por la crisis. Razón de más para celebrarlos, porque, si vas a aguantar esos sinsabores sin ni siquiera salir al final de los títulos de crédito, qué menos que tener la posibilidad de llevarte un galardón a casa.