El obispo de Santander llama a la solidaridad con los parados y las familias afectadas por la crisis

El obispo de Santander, Vicente Jiménez Zamora, ha hecho un llamamiento a la "solidaridad" hacia los parados y las familias cántabras que están sufriendo las consecuencias de la crisis económica.

Así lo plantea en una carta pastoral que ha presentado con motivo de la jornada de San José Obrero, que se celebra este domingo, conmemoración también del Día del Trabajo.

Según informa el Obispado en nota de prensa, Jiménez Zamora considera que la "grave situación social y económica" que se atraviesa debe empujar a analizar "en profundidad" las causas de la crisis, que son "de raíz antropológica", a cambiar "lo que sea necesario" y a "ejercer la solidaridad con las familias y las personas" que más sufren las consecuencias de la crisis.

En esta línea, ha animado a los cántabros a participar en la Campaña de ayuda en favor de los parados que la Diócesis activó hace ahora un año, con motivo del pasado Primero de Mayo.

La iniciativa invita a destinar el salario de un día al mes para un fondo que gestiona Cáritas Diocesana de Cantabria que sirve para socorrer a las personas afectadas por la crisis, "sobre todo a los que se encuentran en el llamado estado de vulnerabilidad".

En su carta pastoral, el obispo recuerda que en la Fiesta del Trabajo la Iglesia se siente cercana a las esperanzas de los trabajadores y especialmente de los que "sufren el paro o de aquellos que soportan unas condiciones de trabajo que imposibilitan una vida digna".

También señala el Primero de Mayo es una jornada para "dar gracias a Dios por el don del trabajo", que "dignifica al hombre y contribuye al bien de la sociedad".