Cantabria

Detenidos tres ladrones de joyerías cuando regresaban de cometer su último golpe en Cantabria

Agentes de la Policía Nacional han desarticulado un grupo dedicado presuntamente a hurtar en establecimientos de joyería y a clientes de entidades bancarias. Tres de los miembros de la banda fueron apresados cuando regresaban de su último golpe, cometido una joyería de la localidad cántabra de Torrelavega, en el que se apoderaron de varias cadenas de oro valoradas en 6.000 euros, según ha informado la Policía en un comunicado.

Los agentes localizaron las piezas sustraídas junto a pasaportes falsificados, ocultos en el techo del vehículo de alquiler en el que regresaban a Madrid, donde tenían establecida su residencia y desde donde se desplazaban de lunes a viernes a distintos puntos de España para realizar los atracos.

Otros dos miembros de este grupo, al que se imputan hasta el momento 13 robos con los que obtuvieron un botín de más de 100.000 euros, fueron detenidos posteriormente.

Las investigaciones se iniciaron el pasado mes de enero tras el hurto de más de 27.500 euros en joyas en un establecimiento de la localidad alicantina de Denia, presuntamente cometido por los miembros del grupo ahora detenidos.

Los investigadores averiguaron que los responsables del robo, de nacionalidad colombiana, residían en Madrid y que de lunes a viernes se desplazaban a diferentes puntos de España para llevar a cabo las sustracciones. Los presuntos ladrones planificaban sus golpes y elegían localidades en las que aún no habían sido identificados o detenidos.

Para desplazarse utilizaban vehículos alquilados con documentación falsa y parte del dinero y las joyas que obtenían con sus actividades ilícitas era remitido a sus familiares en Colombia mientras que el resto lo vendían en establecimientos de compra-venta de oro.

La banda se había especializado en sustraer al descuido alhajas en establecimientos de joyería. Una vez seleccionado el objetivo, uno de los miembros accedía al comercio simulando ser un cliente más y se interesaba por diversos artículos con la intención de distraer a los empleados. Después entraba el resto del grupo y aprovechaban cualquier distracción para apoderarse de los objetos de valor, según la Policía.

Otra de sus actividades delictivas era abordar a clientes de entidades bancarias a su salida de las sucursales para sustraerles el efectivo.

En esta ocasión, uno de los miembros del grupo accedía al patio de operaciones para seleccionar a sus víctimas. Cuando salían del banco la "marcaba" al resto del grupo que esperaba fuera mediante una llamada telefónica o con una señal previamente acordada, al tiempo que indicaba el lugar donde había guardado el dinero.

Finalmente, elegían un lugar propicio para distraer a sus víctimas, tras mancharles la ropa o simulando un pinchazo de la rueda del vehículo, para apoderarse del efectivo.

Los investigadores seguían de cerca a tres de los integrantes del grupo, que fueron abordados a su llegada a Madrid cuando regresaban de su último robo en Torrelavega. Posteriormente se detuvo al resto de la banda.

Se han practicado dos registros en los que se han recuperado 160 piezas de joyería, 30 relojes, más de 7.700 euros en efectivo y aparatos electrónicos. Hasta el momento se les atribuye su participación en 13 robos perpetrados en las provincias de Alicante, Pamplona, Toledo, Cantabria, Vizcaya, Ávila, Segovia, Albacete y Burgos.

La investigación ha sido realizada por agentes de la Brigada Central de Crimen Organizado de la Comisaría General de Policía Judicial en colaboración con el Grupo de Policía Judicial de la Comisaría de Denia (Alicante).