Anitta Ruiz Consultora de moda | #LAROPAHABLA
OPINIÓN

El Goya a ¿cómo hacer una película creíble? es para...

'La sociedad de la nieve'
'La sociedad de la nieve'
Netflix
'La sociedad de la nieve'

Cuando en la Sociedad de la Nieve los supervivientes se enteran de que los helicópteros vienen a por ellos tras 72 días en las montañas empiezan a acicalarse. Se lavan los dientes y se peinan las greñas mientras buscan entre sus escasas pertenencias las ropas que están menos ajadas. Así lo contaron los que estuvieron en los Andes y así lo ha recreado con una veracidad que pone los pelos de punta el equipo de vestuario y maquillaje de Bayona. Su fiel labor de reconstrucción estética es una parte muy importante del viaje que nos lleva hasta el corazón de la cordillera. 

Este es solo un ejemplo de lo importante que son estos departamentos en el correcto desarrollo de una película. Las categorías de 'Diseño de vestuario' y 'Maquillaje y peluquería' podrían pasar por eso que llaman premios menores. Pero no. Y no lo digo sólo por la parte que me toca, sino porque si un guion es maravilloso pero los personajes están absolutamente descontextualizados, no hay película. O al menos, no te la crees.

Mañana se celebran los Premios de la Academia Española del Cine, los Goya. Este año, junto con Julio Suárez por La Sociedad de la Nieve está nominada Lala Huete por Saben Aquell. Ella y su equipo han tenido la complicada labor de recrear en la pantalla la España de los 70 y sobre todo a aquel humorista extraño que sorprendió a un país acostumbrado a una dictadura. Sus gafas, la camisa negra, el taburete, los cigarrillos y el vaso de tubo... Hablar de Eugenio es hablar de un estilo y serle fiel sin caer en la caricatura seguro que ha sido un gran desafío. 

'Saben aquell'
'Saben aquell'
Cinemanía

Sumergir al espectador con la ropa de los actores

Recrear tiempos no tan lejanos es mucho más complicado de lo que pueda parecer. A ese reto también se ha enfrentado Mercé Paloma en La contadora de películas. Son los años 60 en un pequeño pueblo. Son muchos de los espectadores de la película los que habrán estado allí y hay que hacerles viajar en el tiempo. Llevarles hasta un lugar en el que ya han habitado. María Armengol juega al más difícil todavía en El Maestro que prometió el mar. La película viaja entre el presente y la Guerra Civil. Y aunque pueda parecer que vestir a un personaje del hoy es sencillo, en realidad tenemos que construir arquetipos modernos con los que convivimos y hacerlos convincentes sin resultar obvios. Los colores, las texturas, las formas... todo juega un papel importante.

Terminamos este recorrido (que quiero que sea un homenaje a estos profesionales) con el delicadísimo trabajo que hizo Nerea Torrijos en 20.000 especies de abejas, donde la ropa juega un papel fundamental en la búsqueda de identidad de la protagonista. Como el cambio de unos simples cordones de zapatos pueden suponer un primer paso en una transición complicada para la pequeña en torno a la que gira la historia pero también la de toda la familia que la rodea. Un sutil y minucioso trabajo que tiene que pasar desapercibido a la consciencia para que funcione a la perfección en el subconsciente, que es desde donde se almacenan las películas de las que nos enamoramos.

'20.000 especies de abejas'
'20.000 especies de abejas'
BTeam Pictures

Quiero terminar haciendo un pequeño recordatorio. No podía despedirme hoy sin decir que en España no sólo hay grandísimos diseñadores, estilistas, figurinistas, sastres, sastras y costureros. Tenemos probablemente las mejores empresas del mundo dedicadas al vestuario de ficción. De las naves de Peris o Cornejo, por dar solo dos hombres, han salido los ropajes de largometrajes como Napoleón o series como Juegos de Tronos. Una industria más que gira en torno a ese mundo que algunos todavía insisten en llamar frívolo y que es el de la ropa.

¿Quieres recibir gratis todos los jueves en tu correo los mejores contenidos de belleza, moda y estilo de vida? Apúntate a nuestra Newsletter.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento