La candidiasis genital es una infección frecuente que, según los últimos datos, afecta a 136.452 mujeres en España. Su sintomatología es muy molesta, ya que cursa con picor en la vagina y vulva, ardor, enrojecimiento e inflamación. Desde el Hospital Universitari Sacrat Cor explican "que afecta a 3 de cada 4 mujeres". Por eso, comprender cuáles son las causas que desencadenan esta infección por hongos es vital.
Las duchas vaginales destruyen la microbiota
Una ducha vaginal consiste en lavar la parte interna de la vagina con agua u otros líquidos. De esta forma, se puede realizar una limpieza más profunda que, realmente, no es necesaria. Es más, algunos artículos explican que solo se deben realizar estas duchas si las recomienda el médico y durante el tiempo que este considere.
En caso contrario, podría producirse una destrucción de la microbiota vaginal, como detalla el doctor Miquel Àngel Jiménez, jefe del servicio de Ginecología y Obstetricia en el Hospital Universitari Sagrat Cor. Y es que, como él mismo dice, la microbiota vaginal "protege la vagina de infecciones". Cuando utilizamos duchas vaginales estamos alterando su pH. Por lo que la candidiasis genital puede aparecer.
Los tampones y la candidiasis genital
Los tampones son muy cómodos cuando se tiene la menstruación, pero también "absorben más humedad y pueden provocar infecciones", explica el doctor Miquel Àngel Jiménez. Cambiarlos cada 3-4 horas es lo recomendado para así evitar que el entorno dentro de la vagina sea el idóneo para que aparezcan los temidos hongos de la candidiasis genital, cuyos síntomas no tardarán en manifestarse.
Jabones no aptos para la higiene íntima
Si bien las duchas vaginales no están recomendadas, sí se puede limpiar la parte externa (la vulva) con un jabón específico. Es importante evitar hacerlo con el mismo que utilizamos para lavarnos el cuerpo, ya que no tiene las características idóneas para ser empleado en la zona íntima.
Por ello, el doctor Miquel Àngel Jiménez recomienda "utilizar un jabón íntimo para la zona externa vulvo vaginal que no altere el pH de la zona". Y el artículo Higiene Íntima expone las siguientes condiciones: "sin perfumes ni colorantes para evitar irritaciones o posibles reacciones alérgicas". Además, debe contener "moléculas lavantes extra suaves".
Evitar prendas íntimas sintéticas
Entre las recomendaciones para prevenir la candidiasis genital, desde el Hospital Sagrat Cor también mencionan el "usar prendas elaboradas con fibras naturales que facilitan la transpiración". Por ejemplo, las hechas con algodón son mejores que aquellas elaboradas con licra.
Además, es mejor evitar las prendas muy ajustadas como los pantalones pitillo muy apretados o los bodies. Esto impide que la zona íntima transpire y es que la humedad en la zona es un factor de riesgo para la aparición de candidiasis.
Como indica el doctor Fernández Moya, director médico de la Unidad de Menopausia y Diagnóstico Prenatal del Instituto de Medicina EGR de Madrid "el 45% tendrá un segundo episodio dentro de los seis meses siguientes". Y es que la recurrencia de la cándida es habitual, por lo que saber cuáles son sus causas puede ayudar en su prevención.
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