Para cuidar los dientes es necesario limpiarlos tres veces al día: por la mañana, después de comer y antes de dormir. Se eliminarán los restos de comida y disfrutarás de dientes blancos y encías rosadas.
Pixabay/slavoljubovskiMás allá del número de veces, es importante hacerlo bien. Para ello, deberás cepillarte de forma suave, sin dañar esmalte ni encías, y haciendo movimientos cortos y circulares hacia atrás y hacia adelante. No olvides también cepillar la lengua.
Pixabay/AlbanyColleyUn cepillo gastado no es tan efectivo ni cumple sus funciones de forma correcta, por lo que lo ideal es que lo cambies cada tres meses. En los eléctricos, también deberás sustituir el cabezal en ese periodo de tiempo.
Pixabay/stevepbEs el complemento perfecto al cepillado y te ayudará a eliminar los restos de comida de entre tus dientes, por lo que es buena idea que lo añadas a tu rutina de limpieza bucal.
Pixabay/muklinikaEl flúor va a prevenir el deterioro dental y además va a servir para fortalecer el esmalte, por lo que es recomendable que la pasta de dientes lleve flúor.
Pixabay/eminensSon dos grandes enemigos de nuestros dientes y tanto el tabaco como el alcohol pueden provocar su deterioro, por lo que se recomienda reducir su consumo al máximo.
Pixabay/Myriams-FotosAunque aparentemente tus dientes estén en perfecto estado, la prevención en el cuidado de la dentadura también es importante, por lo que es aconsejable acudir al dentista al menos una vez al año.
Pixabay/drshohmelianCon el enjuague prevendrás la aparición de caries y eliminarás el sarro. Para que cumpla su función, deberás mantenerlo en la boca durante al menos 30 segundos y no ingerir alimentos media hora después.
Pixabay/OlichelCon las frutas aumentan tus defensas y se fortalece la salud bucodental. La mandíbula además se ejercita y los dientes están fuertes.
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