No es recomendable ingerir muchos alimentos antes de ir a la cama, ya que la digestión será más pesada y afectará de manera importante al descanso. Lo mejor es cenar ligero.
Pixabay/Life-of-PixIgual de importante que no pasarse con las cantidades es el hecho de no comer justo antes de irse a dormir. De hecho el cuerpo humano suele tardar entre dos y tres horas en hacer la digestión, por lo que no es buena idea esperar hasta el último minuto para tomar algo.
Pixabay/fancycrave1Más allá de que sea importante limitar el consumo de estos productos, lo cierto es que por las noches pueden suponer una bomba para tu cuerpo, ya que el organismo tardará más en procesarlos y además puede que hagan que te despiertes durante la noche.
Pixabay/BaohmOtra opción que no es muy recomendable. Lo normal es que te den sed y por la noche te tengas que levantar a beber agua, no descansando tanto como necesitas. Mejor evitar estos productos al máximo.
Pixabay/HNBSAunque tiene un efecto sedante y probablemente te duermas con más facilidad, lo cierto es que puede afectar al sueño, haciendo que te despiertes en la noche. Mejor reducir su consumo al máximo por la noche.
Pixabay/PeterKraayvangerEs una costumbre muy arraigada, pero que no es muy buena. Y es que la cafeína y la teína son sustancias estimulantes, por lo que pueden ayudarte a que pases la noche en vela.
Pixabay/grafmexTambién contiene cafeína (cuánto más puro, más contiene) y además aporta mucha energía, por lo que tomarlo antes de ir a dormir puede tener el efecto contrario.
Pixabay/AlexanderSteinPara tener un buen descanso es mejor evitar alimentos que provocan acidez, como es el caso del tomate, la cebolla o los fritos.
Pixabay/sansojaBeber agua es un hábito muy saludable, pero es mejor no pasarse por las noches, ya que te obligará a acudir al servicio e interrumpirá el sueño.
Pixabay/insightzaoyaAunque la carne es muy importante para el organismo, por la noche siempre será una mala idea, ya que es difícil de digerir y puede provocar alteraciones en el sueño.
Pixabay/takedahrsHay varios medicamentos que pueden interferir en el sueño, por lo que lo ideal es reducir su consumo o consultar con el médico alternativas para que no afecten tanto al descanso.
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