A lo largo de su filmografía, y fuera de ella, Russell Crowe nos ha dado pruebas muy abundantes de cómo se las gasta. Así pues, ¿te atreverías a ponerte flamenco con él en una discusión de tráfico? Piénsatelo dos veces, porque la protagonista de este filme tiene esa idea… y acaba arrepintiéndose con creces.
CinemaníaEn el mejor título de su filmografía, el director de 'Batman Forever' convierte a Michael Douglas en un pedazo de virilidad tóxica con piernas y peinado cepillo, encarnación de los rencores de una clase media desposeída por la recesión. Lejos de la apología, la cinta resulta una sátira feroz del subgénero de vigilantes urbanos: al final, resultó que el protagonista había sido el malo todo el tiempo.
CinemaníaA 'Marty' y al guionista Paul Schrader no les hace ninguna gracia esto, pero lo que es, es lo que hay: sin ese Robert De Niro que pasa de veterano tronado de Vietnam a profesional del 'tequi', y de ahí a vengador con pistolones y pelo de mohicano en una Nueva York de pesadilla, el género de vengadores urbanos y cabreados no sería lo mismo. Irónicamente, y pese a los años, Travis sigue siendo uno de los integrantes más jóvenes de esta lista.
CinemaníaUn año antes de De Niro en 'Taxi Driver', Charles Bronson puso la piedra angular de los 'vigilante films' mediante la figura icónica de Paul Kersey, arquitecto con bigotón convertido en juez, jurado y ejecutor tras el asesinato de su esposa. Cuatro secuelas (la última, estrenada 20 años después del original) y un desastroso remake protagonizado por Bruce Willis dan testimonio del éxito de la franquicia.
CinemaníaDurante los 80, las películas de justicieros urbanos dieron muchos ejemplos señeros, pero pocos de ellos llegaron a los extremos 'over the top' de este filme. Porque, si bien los veteranos de Vietnam armando la marimorena fueron habituales en el cine de la época, solo el encarnado por Robert Ginty churrascó los barrios bajos de Nueva York, lanzallamas en mano, para vengar la muerte de su mejor amigo. Su secuela 'El exterminador 2' llenó las salas de olor a gasolina en 1984.
CinemaníaAlberto Sordi, rey de la 'commedia all'italiana', dio un giro memorable a su registro habitual en este filme dirigido por un autor clave del subgénero. Porque, si bien 'Un burgués…' comienza como una de esas películas cómicas tan propias del país de la bota (con sus gags a costa de la corrupción, el enchufismo laboral y otras lacras), el periplo de su protagonista no tarda en torcerse hacia derroteros que encajan de lleno en el tono de este informe, y que dan muy mal rollo.
CinemaníaSegún el saber popular (y las experiencias de más de uno), los profesores suplentes son los auténticos mártires de la enseñanza. Pero, en este filme, esto no se aplica ni de lejos. Puestos a meter al alumnado en vereda, nada mejor que un Tom Berenger exmercenario, dispuesto a aplicar en un instituto de barrio marginal las mismas tácticas que su sargento Barnes de 'Platoon' empleaba con los 'charlies' en Vietnam: con un docente así, a cualquiera se le ocurre mirar el móvil en clase.
CinemaníaConcebida como su despedida de la interpretación (o eso decía él), el gran Clint amagó en este filme con mostrarnos la vejez de uno de esos vengadores con Magnum '44 que él mismo popularizó con 'Harry el sucio'. Pero tratándose de él, la cosa tenía que ir más allá: en la práctica, 'Gran Torino' resultó ser un filme sobre el ocaso del Gran Macho Estadounidense y su reemplazo por una nueva generación cuyos orígenes estaban (¡gasp!) entre la juventud inmigrante. Lo cual no fue óbice para que Eastwood nos ofreciera algunas de sus mejores miradas de mala leche durante el metraje.
CinemaníaAl ensayista Owen Jones, autor de libros como 'Chavs. La demonización de la clase obrera', esta película debe darle muchos sudores. No podía ser menos, teniendo de protagonista a un Michael Caine dispuesto a desquitarse de esos canis que, no contentos con dejar hechos una pena su barrio de protección oficial y su pub de toda la vida, se cargan a su mejor amigo. Dado que el actor inglés demostró su talento para la masacre urbana en filmes como 'Asesino implacable', no hace falta que nos digan que su personaje es un veterano de los Royal Marines para saber que la cosa va a acabar en masacre.
CinemaníaDebutando en largo con una secuela de su cortometraje 'Carne', Gaspar Noé dejó claro por dónde iban a ir los tiros en su filmografía posterior con esta película sobre un carnicero (Philippe Nahon) que pretende recuperar su vida y a su hija discapacitada tras una estancia en la cárcel. Experimentación formal, violencia que revuelve las tripas y proclamaciones a pecho descubierto sobre los horrores de la vida son los ingredientes claves de este filme, agraciado con uno de los finales más sórdidos de los que uno tiene memoria.
CinemaníaComo ya hemos visto, la mayoría de películas con señor cabreado comienzan con alguien tocándole las narices a quien no debe. Y la cinta francesa que convirtió al protagonista de 'La lista de Schindler' en estrella del cine de acción es el ejemplo paradigmático: antes de secuestrar a una joven para la trata de blancas, aconsejamos comprobar que su padre no es un agente secreto con una serie de habilidades concretas capaces de convertir la vida de cualquiera en un infierno. Que luego pasa lo que pasa.
CinemaníaTodo género cinematográfico tiene su parodia, y el de los vigilantes urbanos y demás no es una excepción. En esta película, un agente de seguros decide dedicar su vida a limpiar la sociedad de indeseables (pederastas, delincuentes, protagonistas de reality shows, gente que habla alto en el cine...) tras recibir un diagnóstico terminal, y acompañado por una encantadora 'sidekick' adolescente. Tal vez su ejemplo sea algo exagerado, pero no negaremos que a veces nos entran ganas de seguirlo.
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