Dan Aykroyd quiso seguir los pasos de su abuelo Samuel, un investigador psíquico y aficionado al espiritismo, y de su padre Peter, también un apasionado de los temas paranormales, creando e impulsando la idea de esta comedia sobrenatural. Los estudios Columbia Pictures aceptaron el proyecto y pusieron entre 25 y 30 millones de dólares para realizarla. El resto es historia con Aykroyd acompañado por Bill Murray, Harold Ramis y Ernie Hudson. Solo en Estados Unidos recaudó 238,6 millones, convirtiéndose en la película más taquillera allí de 1984. Los Oscar la nominaron a dos estatuillas: mejores efectos visuales y canción (una estatuilla en este apartado que fue a parar a la canción 'I Just Called to Say I Love You' de Stevie Wonder para 'La mujer de rojo').
ColumbiaUna película de terror, pero dirigida al público familiar. O más o menos, porque en su momento fue uno de los títulos que hizo crear la calificación PG-13, no recomendada para menores de 13 años. Con guion de Chris Columbus, Steven Spielberg como productor estuvo valorando que la dirigiera Tim Burton, pues su corto de acción real 'Frankenweenie' le había encantado. Sin embargo, este no tenía experiencia aún en el largometraje, de manera que acabó decantándose por Joe Dante, que había dirigido las terroríficas 'Piraña' y 'Aullidos'. Fue otro taquillazo con 153,1 millones de dólares, la cuarta película más taquillera en Estados Unidos. En cambio, los Oscar la ningunearon.
Warner Bros.La secuela de 'En busca del arca perdida' fue en realidad una precuela. La acción se situaba un año antes, en 1935, y ¿qué mejor manera que empezar la película con un número musical al estilo del Hollywood clásico? Además contiene algunas de las escenas más oscuras (también recibió la calificación en Estados Unidos de PG-13) y también antológicas de la saga. Imposible olvidar el personaje de Kate Capshaw, futura esposa de Spielberg, metiendo la mano en un agujero infestado de bichos ¡reales!, la famosa persecución en vagonetas en la mina, un prodigio de planificación y montaje, y un Harrison Ford que definitivamente nació para ser Indy. Fue la tercera película más taquillera en Estados Unidos con 179,9 millones de dólares, pero la número uno a nivel global con 333. Obtuvo el Oscar a los mejores efectos visuales y fue nominada a mejor música, de John Williams. Y el pequeño Tapón, Ke Huy Quan, acabaría ganando la estatuilla como actor de reparto en 2023 por 'Todo a la vez en todas partes'. En definitiva, si os apetece una de sorbete de sesos de mono, pues ya sabéis.
LucasfilmEl poder de la imaginación a través de los libros. Y pese a que al autor de la novela, Michael Ende, no le llegara a gustar nada esta adaptación, la producción alemana más cara hasta ese momento es uno de los clásicos ochenteros en la materia. Las aventuras de Bastian, Atreyu, la Emperatriz infantil o el dragón volador Fújur se quedaron en la adaptación de solo la primera parte de la obra, y aunque en Estados Unidos no fue un éxito especial, solo recaudó 20 millones de dólares, arrasó sobre todo en Europa, alcanzando los 100 millones en la taquilla mundial. Otro apartado inolvidable fue el de la música, en el que estuvo involucrado el gran gurú de la música disco y con sintetizadores Giorgio Moroder, y el impacto de la canción interpretada por Limahl acabó de redondear la popularidad, y la cuenta bancaria de los responsables del filme.
Warner Bros.Desmontando el mito de que no nos gustan las pesadillas, la creada por Wes Craven funcionó de tal manera que generó seis secuelas más, un crossover con 'Viernes 13' ('Freddy vs. Jason'), y un intento de reinicio de la saga en 2010 con Jackie Earle Haley en lugar de Robert Englund metido en el roído sombrero y jersey de rayas rojas y negras. En la película que lo inició todo, a Krueger (Englund) le bastó aparecer durante unos pocos minutos a lo largo de todo el metraje para convertirse en un icono instantáneo del cine de terror. En taquilla, recaudó más de 57 millones de dólares en cines y apenas había costado un millón.
New Line Cinema'Si al bueno de Englund le bastaron siete minutos en pantalla para hacerse con el público, Schwarzenegger tuvo más que suficiente con llegar a pronunciar menos de sesenta palabras a lo largo de la película (no es de extrañar, de hecho era un cíborg), logrando que una de sus frases, "I'll be back" (Volveré) se convirtiera en mítica. En principio, debía interpretar el papel del protector de Sarah Connor (y que acabaría encarnando Michael Biehn) en vez del temible T-800 llegado del futuro, y es que James Cameron había pensado antes en Lance Henriksen (que luego encarnaría al androide Bishop en 'Aliens, el regreso'). Además, la misma Linda Hamilton, como Sarah, dudaba seriamente de las dotes interpretativas de un "culturista" metido a actor. Pero el plan funcionó de perlas, y su argumento de un cíborg llegado de un mañana postapocalíptico para eliminar a la madre del futuro líder de los rebeldes humanos contra las máquinas fue valorado como sorprendente e innovador. No tanto para los creadores del episodio 'Soldier' de 1964 de la serie 'Más allá del límite', a su vez basado en el relato corto 'Soldier From Tomorrow' de 1957, por lo que Cameron y los productores tuvieron que llegar a un acuerdo para evitar un litigio en los tribunales. Su rendimiento en taquilla fue extraordinario. Había costado 6,4 millones de dólares y recaudó 78,3 en cines.
20th Century StudiosNo todo iban a ser alegrías para las películas de género fantástico de 1984. Y ahí está la adaptación de la magna obra de Frank Herbert que impulsó el célebre productor Dino De Laurentiis. Tanteó a Ridley Scott, cuando aún estaba enfrascado en 'Blade Runner', para dirigirla, pero finalmente las riendas de la dirección se las pasó a David Lynch (con solo dos largometrajes a sus espaldas. la surrealista 'Cabeza borradora' y la extraordinaria 'El hombre elefante'), quien acaba de decir no a George Lucas para dirigir 'El retono del Jedi'. Fue una superproducción de más de 40 millones de dólares, y en taquilla fracasó recaudando, por ejemplo, poco más de 30 en Norteamérica. Unido a las críticas desiguales que recibió, muchas tirando a malas, se desecharon los planes de más entregas. ¿Un film fallido? Quizá, pero también una película de culto con un diseño de decorados y vestuario único, recorrido por una malsana y rara atmósfera. Esto, y que ver a Kyle MacLachlan ('Twin Peaks') haciendo del profeta Paul Atreides o al cantante Sting de psicópata Feyd Rautha no tiene precio, por no hablar de la música inconfundiblemente ochentera y pegadiza que compuso el grupo de rock estadounidense Toto.
Dino DeLaurentiis CorporationTampoco todo iban a ser superproducciones. La conocida productora y distribuidora Troma se gastó solo medio millón de dólares para lo que acabaría siendo otro de sus títulos de culto de serie B. Una de superhéroes, muy gamberra, gore y con efectos visuales en buena parte caseros. El filme creado por Michael Herz y Loyd Kaufman, fundadores de Troma, con guion de Joe Ritter, fue el resultado de, más o menos, una vivencia personal del propio Kaufman, cuando accidentalmente derramó un barril de residuos tóxicos cuando trabajaba como empleado de la limpieza, fusionada a su experiencia en el set del rodaje de 'Rocky', entre gimnasios. Y aunque los ingresos en cine fueron insignificantes, dio para unas cuantas secuelas más, una serie de animación, cómics e incluso un musical y, actualmente, para un remake dirigido por Macon Blair y protagonizado por Peter Dinklage.
TromaMás que un éxito comercial, lo que obtuvo fue un formidable recibimiento por parte de la crítica. No era para menos. El irlandés Neil Jordan, que después realizaría títulos como 'Juego de lágrimas' o 'Entrevista con el vampiro', se basó en la serie de relatos escritos por Angela Carter, todos ellos con el nexo en común de temáticas relacionadas con hombres lobo, y con el clásico cuento de la Caperucita Roja como elemento más reconocible. Un filme onírico, cargado de capas y subtextos, en el que el surrealismo, psicoanálisis o el despertar de la sexualidad en el paso de la preadolescencia a la edad adulta conforman una de las mejores obras cinematográficas sobre licantropía. Entre los premios que recibió estuvo el de mejor película y efectos visuales en el Festival de Sitges.
ITC EntertainmentPese a sus limitaciones, sigue siendo una de las adaptaciones más reconocibles de un relato de Stephen King, y en ella encontramos de nuevo a Linda Hamilton entre los protagonistas. Su argumento en torno a una secta de fanáticos compuesta solo por niños adorando a un ser demoniaco al que llaman "El que camina detrás de la fila", le valió en su momento que algunas escenas fueran censuradas en numerosos países. También contiene similitudes con la novela de Juan José Plans 'El juego de los niños', adaptada por Narciso Ibáñez Serrado en '¿Quién puede matar a un niño?' de 1976, uno de los grandes clásicos del terror de nuestra cinematografía. El relato de King conoció otras secuelas, y también remakes actuales, pero ninguno a la altura de la película del debutante Kiersch. Su presupuesto fue de unos 800 mil dólares y en los cines norteamericanos recaudó más de 14 millones.
Hal Roach StudiosBasada en un manga del propio Miyazaki, lo que debía ser primero un corto acabó desarrollándose como un largometraje, y realizado con un espacio de tiempo para la realización y presupuesto limitado. Pero su éxito, un taquillazo en Japón, más discreto en el resto del mundo, permitió la creación del legendario Studio Ghibli. También fue la primera colaboración de Miyazaki con el compositor Joe Hisaishi. Su protagonista y la historia ambientada en un futuro postapocalíptico también sirvió de inspiración para Miyazaki para otra de sus incuestionables obras maestras, 'La princesa Mononoke'.
Toei CompanyA Michael Myers, sí el psicópata asesino en serie indestructible de 'La noche de Halloween', además de dedicarse a matar gente también le entraron ganas de dirigir películas. Bueno, al personaje no, pero sí al actor detrás del personaje, un Nick Castle que realizó un pequeño clásico ochentero de la ciencia ficción juvenil con este título. El sueño de un joven (Lance Guest) de abandonar su pequeño pueblo para ir a labrarse un porvenir mejor en la universal quedará truncado. Sin embargo, el destino le tiene reservado un papel mucho más heroico cuando, a través de un videojuego arcade, sea el único humano reclutado por la Liga de las Estrellas, que nada que ver con el deporte, lo que hacia era intentar reclutar a los mejores pilotos para hacer frente a un poderoso enemigo intergaláctico. Su presupuesto fue de 15 millones de dólares, y su taquilla discreta, 28 millones en Estados Unidos. Pero es un filme valioso teniendo en cuenta que fue pionero en sus efectos visuales, creados completamente por ordenador. Antes estaba el precedente de Disney con 'Tron', realizado en gran parte, pero no totalmente, por CGI.
UniversalDespués del fracaso de 'La cosa', a pesar de que hoy en día está considerada como una de las grandes películas de Carpenter, el director aceptó dirigir este encargo de los estudios Columbia para mantener su status en Hollywood. Con ciertas similitudes al taquillazo de 'E.T., el extraterrestre', se centraba también en un alienígena perdido en nuestro planeta y perseguido por los agentes del gobierno, yendo a parar a la cabaña de una joven viuda, Jenny (Karen Allen), y adoptando la forma de su difunto marido. Inevitable que entre ambos surgiera una historia de amor. El problema es que Carpenter tampoco tuvo fortuna, pese a la buena recepción de los críticos, su presupuesto de 24 millones tampoco logró generar beneficios en taquilla, con 28,7 millones recaudados en Estados Unidos. Y en esta ocasión los Oscar la tuvieron en cuenta, significando la tercera nominación como actor, la primera como protagonista, para Jeff Bridges. En 1986 se estrenó una serie de televisión con el hijo de Starman y Jenny.
ColumbiaLa visión de esta modesta película es de las que hay que contemplar con condescendencia y como un viaje al pasado para disfrutarla, pese a contar con una historia adelantada a su época, por lo desfasado de su tecnología y efectos. Necesario para llegar a creernos que un primitivo PC (un Commodore 64) llega a desarrollar tal grado de inteligencia artificial, o mejor dicho emocional, como para enamorarse de su vecinita de al lado, una joven violoncelista llamada Madeline (Virginia Madsen, presente también en la superproducción 'Dune'). Otro de sus puntos fuertes fueron las canciones de la banda sonora y la maravillosa es la escena en la que el enamoradizo, y muy posesivo, ordenador llega a interpretar un dueto, separado por las paredes de ambos apartamentos, junto a la protagonista con el tema 'The Duel' adaptado por Giorgio Moroder a partir de una pieza de música clásica. Significó el debut en la dirección de Steve Barron, afamado realizador de videoclips, como el de 'Billy Jean' para Michael Jackson, y que pocos años después dirigiría la versión en imagen real de 'Las Tortugas Ninja' (1990). No fue un especial éxito de taquilla, costó 5,5 millones de dólares y recaudó 2,5 en cines. Y como homenaje a la obra de Philip K. Dick, en el minuto 56, podemos comprobar como el ordenador, después de preguntarse qué es dormir, empieza a soñar con el clásico recurso de unas ovejitas "eléctricas" saltando una valla.
MGMMarvin J. Rosenblum, uno de los productores ejecutivos, llegó a decir que "la película tuvo uno de los mejores ganchos comerciales de toda la historia: una película de '1984' hecha en 1984". Y así fue para la adaptación de la referencial novela de George Orwell publicada en 1949, su célebre distopía sobre mantener a los ciudadanos permanentemente vigilados y bajo control. Además, sus responsables también aseguraron que había sido rodada entre abril y junio de 1984, exactamente durante el mismo periodo que abarcaba la novela. Protagonizada por John Hurt y Suzanna Hamilton, fue también la última interpretación de Richard Burton, que fallecería en agosto de aquel mismo año.
Virgin FilmsUna empresa destinada a fracasar, o al menos a cargar con el rechazo de los incondicionales de la obra maestra de Kubrick basada en la novela de Arthur C. Clarke. El director de 'Capricornio Uno' o 'Atmósfera cero' asumió el reto de esta secuela, trasladando la acción nueve años después de la desaparición del USS Discovery, en una misión conjunta entre norteamericanos y rusos a Júpiter para, una vez dentro de la nave, intentar reactivar Hal 9000 y tratar de saber lo que le ocurrió a la expedición. El resultado fue una película más convencional y totalmente opuesta a la de Kubrick, pues quería dar respuestas cuando, en realidad, su predecesora, '2001, una odisea del espacio', se planteaba como una experiencia y viaje sensorial sembrando más interrogaciones que resoluciones. En taquilla no le fue especialmente mal, pero tampoco encandiló. Costó 28 millones de dólares y en los cines estadounidenses recaudó 40,4. En los Oscar recibió 5 nominaciones: efectos visuales, sonido, maquillaje, vestuario y decorados.
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