10 directores de cortos listos para el largo

Son el futuro de nuestro cine aunque casi nadie los conoce. Habitan en Vimeo y discretamente recorren festivales (Clermont-Ferrant, Oberhausen, Bristol, Gijón…), ganando prestigiosos premios y sacándole brillo a la Edad de Oro del cortometraje español. Para algunos los cortos lo son todo: su escuela, su pasión y la posibilidad de hacer los que más les gusta, dirigir. Otros ni siquiera se consideran cortometrajistas, aseguran que lo importante es contar historias y que no les preocupa la duración que éstas tengan. Pero todos coinciden en una cosa: del corto al largo hay un abismo que, en algún momento, tendrán que saltar.

Según Borja Cobeaga, cortometrajista que hace poco estrenó No controles, su segundo largo: “El salto existe sobre todo en la escritura, porque un corto lo escribes de un impulso pero un largo es como escalar el Everest”. “Aunque también existe una brecha social”, nos explica Daniel Sánchez Arévalo (Primos), “puedes tener muchísimo prestigio en el mundo del corto que en el del largometraje no eres nadie”.

Y luego está el triple tirabuzón del salto, que es encontrar un productor y una distribución para la película, algo cada vez más complicado y que, según Daniel Sánchez Arévalo: “está llevando a la polarización del cine: se hacen películas muy comerciales u otras más arriesgadas que van directamente a los circuitos de festivales”. Según el director de Azuloscurocasinegro: “Hay muchísimos talentos en el mundo del corto español que tienen un estilo propio gracias a la libertad que les otorga el formato en el que trabajan, pero habrá que ver si en un largo, con una producción detrás, se les deja mantener ese espíritu”. Esto último lo comparte Txema Muñoz, responsable del programa vasco Kimuak (un pionero en la exhibición nacional e internacional de cortos y del que han salido cineastas como Cobeaga o Nacho Vigalondo): “Trasladarse del lenguaje del corto al largo no es sencillo, hay quien puede hacer cortos estupendos y perderse en el largo, y viceversa”.

¿Es tan complicado dar el salto al largo? “No”, afirma Sánchez Arévalo, “lo importante es tener una buena historia. Si tienes algo bueno que contar serás un buen director de largometrajes”. Sin duda los diez cortometrajistas que a continuación citamos y tantos otros (Raul Navarro, Martín Rosete, Esteban Crespo, Isabel de Ocampo, Isabel Herguera, David González, Igor Legarreta, Adrián Orr, Gonzalo de Pedro, Javier Garmar, Natalia Mateo, Carlo Padial…) que darían para muchas listas más, tienen historias que contar y tiempo (más de 60 minutos) para hacerlo.

Descubre a estos 10 directores de cortos listos para el salto al largo en el reportaje de CINEMANÍA.