'Unorthodox': las claves de la inesperada miniserie de moda de Netflix

En 2017, las calles de Jerusalén se convirtieron en un campo de batalla por las revueltas de los judíos ultraortodoxos contra los militares y los políticos israelíes, y no era la primera vez. Este grupo minoritario pero numeroso (supone hasta un 12% de la población del país) entraña un conflicto para la sociedad y los turistas de la zona. Parapetados en varios de los barrios del país de Oriente Medio, conviven bajo unas normas muy estrictas e impiden su relación con el resto del mundo.

Dentro de este tipo de judaísmo coexisten a su vez varias corrientes, como la de los jasidíes, una de las más comunes en Brooklyn, Nueva York (Estados Unidos). Una comunidad que mantiene un curioso estilo de vida entre los rascacielos, y es reflejo de una parte de la sociedad norteamericana más desconocida, en la que ha querido hacer hincapié la nueva miniserie de moda de Netflix: Unorthodox.

La historia está basada en la novela autobiográfica Unorthodox: el escandaloso rechazo de mis raíces jasídicas de Deborah Feldman, autora que vivió en sus propias carnes la vida de la protagonista dentro de la secta jasídica de Satmar, que proviene de Hungría. Una comunidad que no olvida los exterminios vividos durante el Holocausto, y que permanecen ajenos a la vida actual, alejados de la tecnología prácticamente (aunque en esto no tan estrictos como los Amish) y bajo unas rigurosas normas de vestimenta oscura y larga, y con shtreimel de por medio para ellos, el sombrero típico de las festividades como el Shabbat.

El papel de la mujer entre ellos es directamente el de 'máquinas de hacer bebés'. Tal cual. Una forma de compensar todos los muertos que ha perdido 'su pueblo' a lo largo de los siglos. Relegadas a un segundo plano, son prometidas por las casamenteras a una temprana edad para tener descendencia. Con innumerables prohibiciones (entre ellas la música o el placer), estas deben tapar incluso su pelo con pañuelos o pelucas para evitar 'seducir' al hombre. Es aquí donde entra la historia de Unorthodox, en la que una brillante Esty decide huir de esta comunidad judía de Nueva York para comenzar una nueva vida en Berlín, donde su madre ya había huido años atrás junto a una mujer. Sin embargo, su marido y una antigua oveja descarriada no se lo pondrán tan fácil para que escape, e irán tras sus pasos.

A sus 24 años, la intérprete israelí Shira Haas da vida de una manera magistral al atormentado personaje, para lo cual tuvo que aprender Yiddish, la lengua hablada por esta comunidad. "Me iba a dormir con el Yiddish  y me despertaba con el Yiddish", señalaba sobre la dificultad del idioma Hass. "Para mí era importante saberme bien los diálogos y lo que estaba diciendo, así cuando iba al set de rodaje no tenía que pensarlo y podía estar realmente en la escena. Fue la mayor parte de la preparación del personaje", señala la actriz para IndieWire.

Algunas cosas tan típicas para nosotros como salir de fiesta, tomar un bocadillo de jamón o bañarse en un lago se convierten en primeras veces para Esty. Y nos abre una ventana ante sus nuevos descubrimientos. Una vida llena de placeres, que ahora más que nunca somos capaces de percibir. La lucha de una mujer por su propia libertad y el conocimiento real del mundo que la rodea se convierten en las claves de la miniserie. Duele especialmente ver escenas como las del corte de pelo al cero, la intromisión constante en su vida sexual o el intento de 'secuestro' auspiciado por el rabino de su sinagoga.

Narrada a través de cuatro episodios, Unorthodox sigue la historia de la protagonista desde su adolescencia, pasando por su matrimonio, a su vida actual en Berlín. Conforma así poco a poco un retrato de cómo es la vida en esta comunidad religiosa de Williamsburg (Brooklyn). Una historia que no pretende en ningún momento demonizar el papel de esta religión sino mostrar cómo es la vida entre ellos. "Esta es la historia sobre una mujer intentando encontrarse a sí misma, y parte de esta serie es también encontrarse como mujer, así que es muy importante ver las escenas íntimas", señalaba Hass.

No es la primera vez que vemos esta historia en la pantalla, puesto que la película Disobedience ya nos dejaba vislumbrar esta situación. La gran historia de amor prohibido de una mujer que ha huido de la vida ultraortodoxa y otra que convive entre ellos. Sobresalientes en estos roles Rachel Weisz y Rachel McAdams. Y que nos mostraba ya las normas estrictas de una sociedad, en el que la mujer siempre está por detrás.

No han sido las únicas adaptaciones, pero sí las más destacables que ponen de relieve la gran problemática de este tipo de comunidades, que viven prácticamente en guetos. Y es que documentales de actualidad, como El palmar de Troya, nos han dejado claro en las últimas semanas los peligros de las sectas, y a la vez el atractivo que supone conocer detalles de las mismas. Concienciar y enseñar sobre los peligros de estas nunca está de más.