Entre 1954 y 1966, la Colonia Agrícola Penitenciaria de Tefía sirvió como campo de concentración franquista para la encarcelación de homosexuales y otros presos políticos, con el objetivo de reeducarlos como parte del cumplimiento de la Ley de Vagos y Maleantes. Alojado en la aldea de Tefía (Fuerteventura, Canarias), este lugar protagonizó uno de los capítulos más oscuros de la historia de España.
Lejos de hacer honor a su nombre como supuesta plantación, este lugar albergó el trabajo forzoso a través de una cantera. Allí murieron numerosas personas a causa del sobresfuerzo y las condiciones de vida infrahumanas, marcando para siempre a aquellos valientes supervivientes que consiguieron escapar a este horror.
La persecución de la homosexualidad comenzó en 1954 con una modificación de la Ley de vagos y maleantes, que nació dos décadas antes en las Cortes de la Segunda República. El colectivo LGTBI fue acusado de las peores infamias y juzgado a penas de reclusión de uno a tres años de duración, cumpliendo condenas en centros de trabajo o colonias agrícolas penitenciarias.
El historiador Miguel Ángel Sosa Machín recogía la tragedia de Tefía en la novela Viaje al centro de la infamia, publicada en 2006. Allí recreaba la tragedia a través del testimonio de hombres como Juan Curbelo Oramas, uno de los pocos que consiguieron resistir los constantes ataques de los encargados de este lugar. Un libro que también ha servido como manual a Miguel del Arco (Las furias) para crear la serie Las noches de Tefía, la nueva producción de Atresplayer que ficciona la vida de estos presos.
El campo de concentración español
A imitación de los triángulos rosas del nazismo, el dictador Francisco Franco instauró un legado de terror entre el colectivo LGTBI de esta época a través de las amenazas de electroshock y las condenas en este campo de concentración. Este lugar albergó a numerosos jóvenes de entre 18 y 23 años, quienes se vieron obligados a trabajos forzosos para 'reconducir su conducta', mientras sufrían una alimentación paupérrima y recibían palizas.
Allí pasaban una media de uno a tres años, para posteriormente ser liberados bajo la prohibición de no poder vivir un año más en la localidad de origen. Los siguientes cinco años debían pasar controles firmando mensualmente en la comisaría, como si estos fueran delincuentes comunes en libertad provisional.
Bajo el yugo del excarmelita Prudencio de la Fuente, el director de este cruento emplazamiento, muy pocos pudieron contar lo acontecido con posterioridad. Entre los nombres de aquellos que consiguieron escapar de este lugar encontramos a Juan Curbelo Oramas, Juanito el Pionero u Octavio García, quienes terminarían denunciando lo vivido en Tefía.
Aunque este campo de concentración fue clausurado en 1966 por el Ministerio de Justicia, la verdad es que se produjo debido al bajo número de reos. Los pocos que quedaron allí fueron transferidos a la prisión de Barranco Seco, en Las Palmas de Gran Canaria.
A pesar del fallecimiento del dictador y la llegada de la Transición a finales de los 70, la persecución al colectivo LGTBI continuó postergándose a través de la ley sobre peligrosidad y rehabilitación social, heredera de la ley de vagos y maleantes.
No sería hasta 1979 cuando la homosexualidad fue finalmente despenalizada, a raíz del nacimiento de diversos movimientos de liberación a lo largo de la geografía española. Paralelamente, España vivió la primera salida pública del armario, la de Armand de Fluviá. Conocido por el pseudónimo Roger de Gaimon, el colaborador de TVE lo reveló en el programa catalán Vostè pregunta.
'Las noches de Tefía', la nueva serie de Atresplayer
La serie Las noches de Tefía ha aprovechado el carácter más angustioso de este campo de concentración para enfrentarlo a la esperanza de unos reos que sueñan con escapar del lugar a través de del Tindaya. Este lugar de fantasía se trata de una sala de variedades que protagoniza las historias que comparten cada noche y donde cada uno puede ser quién quiere ser realmente.
Patrick Criado (Antidisturbios), Marcos Ruiz (Las leyes de la frontera), Jorge Perugorría (Che: Guerrilla), Miquel Fernández (Apagón), Roberto Álamo (Que Dios nos perdone) y Raúl Prieto (El ministerio del tiempo) encabezan el reparto de esta nueva serie de Atresplayer, que comenzaba sus emisiones el pasado 25 de junio.
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