"Un actor legendario y un buen hombre": Emily VanCamp ('Everwood') y otras figuras de la televisión se despiden de Treat Williams

Hoy hemos amanecido con la noticia de la muerte de Treat Williams a los 71 años, víctima de un accidente de moto. Este actor se dejó ver en varios títulos célebres como Hair, El príncipe de la ciudad o Érase una vez en América, pero sobre todo fue conocido por su papel protagonista en Everwood. Esta serie de Greg Berlanti se extendió a cuatro temporadas entre 2002 y 2006. Williams es el tercer miembro de su reparto que muere en cuestión de meses, tras Anne Heche y John Beasley.

Por el elenco de Everwood pasó gente como Gregory Smith, Chris Pratt o, especialmente, Emily VanCamp, teniendo aquí uno de sus primeros papeles importantes. VanCamp, de hecho, volvió a colaborar con Williams en un telefilm posterior, Beyond the Chalkboard, de forma que ha sido una de las primeras figuras en reaccionar a la noticia. Así ha escrito en Instagram: "Todas la veces que hemos trabajado juntos han sido maravillosas, y siempre estaba emocionada por la próxima vez. Mando todo mi amor a la familia, Treat. Vuela alto, amigo mío".

David Simon, por otra parte, le ha alabado a raíz de El príncipe de la ciudad, influyente drama policial que dirigió Sidney Lumet e influyó enormemente al creador de The Wire: "El príncipe de la ciudad fue la única película que me hizo creer que alguien más sabía la verdad sobre la guerra contra las drogas (...) RIP a un actor legendario y un buen hombre".

Wendell Pierce, actor de precisamente The Wire, ha recordado cuando coincidieron trabajando: "Un hombre apasionado y creativo. En poco tiempo se convirtió en mi amigo y su espíritu aventurero era contagioso. Solo trabajamos juntos en una película, pero a lo largo de los años mantuvimos el contacto. Amable y generoso con sus consejos y su apoyo".

James Woods colaboró con Williams en Érase una vez en América de Sergio Leone, y recuerda con cariño la experiencia: "Pasamos meses en Roma rodando Érase una vez en América. Fue un rodaje largo y solitario, pero su sentido del humor fue una bendición. Le quería mucho y estoy desolado por su pérdida".