¿Se ha acabado para siempre la saga de 'Indiana Jones'?

Seamos realistas: George Lucas se ha retirado de las superproducciones, y casi que también del cine en general. Steven Spielberg parece tener las miras puestas en su siempre codiciado Oscar y en el motion capture, por mucho que Las aventuras de Tintín no recaudara mucho. Y Harrison Ford, aunque no esté en la cúspide de su popularidad, acabó lo bastante quemado de Shia LaBeouf y de hacer acrobacias pasados los 60 como para tener ganas de más. Es decir, que las dudas sobre la posibilidad de un Indiana Jones 5 son más que razonables, por más que haya voces que afirmen lo contrario. Ahora, el veterano productor Frank Marshall, mano derecha de Lucas y Spielberg desde el rodaje de En busca del Arca perdida, ha añadido un nuevo clavo en el ataúd de la serie.

"Por lo que a mí respecta, Indiana Jones y el Reino de la calavera de cristal ha sido el último 'hurra' de 'Indy", comentó Marshall en una entrevista con Collider. Según prosigue el productor, aunque George Lucas y el hombre de la gorra hayan confesado acariciar la idea de un quinto filme, "no hay un macguffin que sirva como punto de partida". Algo que es casi como decir que la película no tiene esperanzas, puesto que los dos autores siempre partieron de una idea o anécdota histórica para crear la trama de cada película. Vamos, que Indiana Jones se ha quedado sin reliquias que robar, lo cual equivale a su jubilación.

Antes de proseguir, aclaremos que estas declaraciones vienen de muy buena fuente: además de colaborador habitual del dúo, Marshall es el esposo y socio de Kathleen Kennedy, la sucesora de Lucas al frente del emporio LucasFilm. A este respecto, Marshall confiesa haber sabido, por vía de su señora, que a Lucas "no le sobran las ganas" de resucitar a una de sus creaciones más famosas.

¿Debemos entristecernos por estas noticias, o más bien alegrarnos? Nosotros votamos por lo segundo: sin Sean Connery, con una Karen Allen que reaparecía en la saga sin mucha justificación y con unos efectos digitales que no aportaban nada positivo, El Reino de la calavera de cristal no fue una película desastrosa, pero sí sabía a muy poco en comparación con sus predecesoras. Sumemos a ello el hecho de que no le gustó ni al propio Spielberg, y tendremos una respuesta clara. Eso sí: siempre cabe la posibilidad de que LaBeouf y el director vuelvan a llevarse bien, y encontrarnos de sopetón con una secuela protagonizada por Mutt Jones... ¿Será ese el momento para huír despavoridos?