Richard Dreyfuss carga contra las nuevas normas de diversidad en los Oscar: "Me dan ganas de vomitar"

Con películas como Tiburón y Encuentros en la tercera fase en su currículum, el nombre de Richard Dreyfuss estará asociado para siempre a la carrera temprana de Steven Spielberg, así como a la cara más comercial del Nuevo Hollywood de los 70. Desde esa veteranía, y a sus 75 años, el actor ha aprovechado para lanzar una encendida diatriba contra las nuevas normas de diversidad en los premios Oscar. 

"Me dan ganas de vomitar", aseguró Dreyfuss en un programa de la PBS (televisión pública de EE UU). "Esto es una forma de arte. También es una forma de comercio, y genera beneficios. Pero es arte. Y nadie debería decirme, como artista, que tengo que ceder ante la idea más reciente y más de moda acerca de qué es la moral". "Lo siento, pero no creo que haya que proteger así a ninguna minoría en este país", añadió.

El actor se refiere a la nueva regla que entrará en vigor en 2024, según la cual los filmes que opten a Mejor película en los Premios de la Academia deberán cumplir dos criterios de una lista de cuatro, centrados en la representación de minorías: en sus temas y su historia, en su equipo, en el acceso a la industria para nuevos profesionales o en la captación del público.

Para explicarlo, Dreyfuss alabó el trabajo de Laurence Olivier como protagonista en su versión de Otelo (1951), una cinta que le granjearía hoy acusaciones de blackface al actor inglés. "Olivier fue el último actor blanco que interpretó a Otelo, e interpretó estupendamente a un hombre negro", afirmó. "¿Me están diciendo que nunca podré interpretar a un negro? ¿Están diciendo que si no eres judío no podrás hacer El mercader de Venecia? ¿Estamos locos?".

"¿Es que no sabemos lo que es el arte?", prosiguió Dreyfuss, ganador del Oscar por La chica del adiós (1978) y nominado por Profesor Holland en 1996. "Esto es condescendiente. Es irreflexivo, y es tratar a la gente como a niños", concluyó.