Muere John Richardson (‘Hace un millón de años’) por coronavirus

Este martes fallecía por coronavirus el actor británico John Richardson, según recogen medios como Cinema Retro. Contaba con 86 años, y llevaba sin aparecer en pantalla desde principios de los 90, habiendo dejado atrás varias décadas donde fue un rostro habitual en icónicas producciones de serie B. Nacido en Sussex en 1934, empezó a trabajar a finales de los 50, siendo el de La máscara del demonio el papel que le daría la fama y que pronto le llevaría a trabajar en multitud de películas a lo largo del mundo, ya fueran españolas, británicas, estadounidenses o italianas.

En el clásico de culto de Mario Bava, estrenado en 1960, Richardson encarnaba al médico cuya sangre ayudaba a despertar a una vampiresa interpretada por Barbara Steele. Poco después de este éxito, que anticipaba el giallo en la cinematografía italiana, el actor protagonizó La diosa de fuego en 1965, donde interpretaba a un arqueólogo que descubría una ciudad perdida gobernada por Ayesha (Ursula Andress). El film, producido por la Hammer y contando con Christopher Lee y Peter Cushing en el reparto, fue otro éxito comercial que daría pie a una secuela también protagonizada por Richardson pero esta vez sin Andress: La venganza de la diosa de fuego, estrenada en 1968.

En 1966 Ricardson se puso a las órdenes de nuestro Joaquín Luis Romero Marchent en El aventurero de Guaynas, y ese mismo año protagonizaría otra de sus películas más famosas: Hace un millón de años, dirigida por Don Chaffey, coprotagonizada por Raquel Welch, y muy recordada por los efectos especiales de Ray Harryhausen. En el 67 protagonizaría el spaghetti-western John, el bastardo, y por entonces sería tanteado para suceder a Sean Connery como James Bond en Al servicio secreto de Su Majestad. Finalmente eligieron a George Lazenby, y aunque este actor no repitiera tras el estreno del film en 1969 los productores no volvieron a llamar a Richardson, decantándose por un regresado Connery y posteriormente por Roger Moore.

A finales de la década protagonizó junto a Anita Eckberg la española Un sudario a su medida y en 1970 se puso a las órdenes del mítico director Vincente Minelli en Vuelve a mi lado, que también protagonizaban Barbra Streisand y Jack Nicholson. En años posteriores Richardson seguiría afincado en la Serie B, y dentro de Italia protagonizó films como Pato a la naranja (1975), El ojo en la oscuridad de Umberto Lenzi (1975) y El engendro del diablo, en 1989.