'Marina Abramovic: La artista está presente'

No es habitual, cada vez menos, que un documental llegue a gozar de distribución en salas comerciales en un país como el nuestro en que el millón de euros recaudado por Searching for Sugar Man puede calificarse casi de milagro. De las andanzas de Rodríguez ya hablamos aquí en el momento de su salida a vídeo, así que ahora vamos a prestarle atención a otro filme documental que ha conseguido estrenarse en pantalla grande este 2013 en nuestro país y que, sin generar tanto alboroto, ha atrapado a todos los que le han dado una oportunidad, ya sea crítica o público. Se trata de Marina Abramovic: la artista está presente.

Absurdo introducir aquí a la protagonista de esta producción de la HBO: Marina Abramovic ha sido unánimemente reconocida como uno de los grandes nombres del arte con mayúsculas durante los últimos 50 años. Precisamente hace unos meses una ópera centrada en su figura y que reunía a toda una serie de talentos en diferentes disciplinas (Bob Wilson, Willem Dafoe, Antony, William Basisnki,…) se convirtió en unos de los éxitos de las últimas temporadas del Teatro Real de Madrid.

El documental dirigido por Matthew Akers y Jeff Dupre nace con motivo de la exposición retrospectiva de la carrera de marina que tuvo lugar en el MOMA de Nueva York en 2010. Con esta excusa el filme hace un repaso de la carrera de la madre de la performance desde su nacimiento en Belgrado en el seno de una estricta familia de héroes partisanos, pasando por un momento clave de su carrera, su relación artística y sentimental con Ulay que terminaría abruptamente con una última colaboración consistente en recorrer cada uno la Muralla China desde un extremo para encontrarse en el centro.

La relación entre ambos performers sirve también de bisagra para abordar la otra gran temática del documental, la acción de Marina en MOMA titulada The Artist Is Present y consistente en permanecer sentada en una silla los tres meses que dura la exposición recibiendo las visitas del público y reaccionando emocionalmente ante sus gestos y miradas (Ulay fue precisamente uno de los que pasaron a visitar a marina y su encuentro se convierte en uno de los momentos más emocionantes del filme).

La edición de Karma, sólo para dvd, cuenta con cuatro contenidos adicionales que en realidad no hacen más que utilizar recursos que finalmente se quedaron fuera del documental para reforzar la información sobre la artista. Marina y Belgrado, por ejemplo es una pieza que se centra en su infancia y primeros e incomprendidos trabajos en la Yugoslavia comunista. Los otros tres extras profundizan en diferentes aspectos de la performance. Una pieza analiza las reacciones del público, otra trata sobre cómo se diseñaron los tres vestidos que marina utilizó durante esos tres meses. Y por último la cuarta en que el responsable último de la exposición, Klaus Biesenbach (al que podemos ver discutiendo sobre actuación vs performance con Marina y James Franco en el siguiente vídeo oficial del museo neoyorkino) explica cómo fueron los preparativos de la expo.